Barcelona, 9 jul (EFE).- La Costa Brava prevé una ocupación del 94 % en los meses de julio y agosto, un porcentaje similar al año anterior, mientras que la Costa Dorada espera un 85 % de ocupación, también como el ejercicio anterior, pero con precios superiores a los de 2015 y un gran aumento, del 40 %, del turismo británico.
El gerente de la Asociación Hotelera de la Costa Brava Centre, Martí Sabrià, prevé un buen verano en la zona, con una ocupación media del 94 % y un mayor gasto por parte del turismo nacional, que se está recuperando.
El mes de julio está funcionando bien y los hoteleros de la zona esperan cerrar con una ocupación del 91 o 92 %, similar al año pasado, mientras que, en agosto, la ocupación puede llegar al 96 %.
"Si no hay ninguna catástrofe, hasta mediados de septiembre tenemos garantizada un buena ocupación", ha dicho Sabrià, que añade que hay mucha tendencia a guardar 4 o 5 días de vacaciones para septiembre para hacer una escapada a la playa en pareja o con amigos.
Hasta el momento, la temporada está siendo buena, aunque Sabrià no tiene claro que este año sea de "récord" en lo que a turismo se refiere, tal y como predijo el conseller de Empresa, Jordi Baiget, el pasado mes de abril en la inauguración del B-Travel, el renovado Salón Internacional de Turismo de Cataluña.
En la Costa Brava la mayoría de los turistas son clientes directos que no utilizan a ningún intermediario, con lo que los meses van mejor o peor en función de la climatología.
Según Sabrià, abril fue un mes "irregular" y mayo no tuvo un comportamiento tan bueno como el año pasado, ya que los franceses tuvieron cuatro puentes en ese mes, mientras que este año sólo han tenido dos, y con el buen tiempo se animaron en venir a la Costa Brava.
"Tampoco creo que el mes de octubre sea como el año pasado, cuando tuvimos una climatología similar al mes de junio", agrega Sabrià.
En la segunda quincena de junio, la ocupación ha sido muy alta, por encima del 80 %, y los fines de semana los hoteles han estado casi al completo, ya que "cuando hace buen tiempo y todavía falta mucho para las vacaciones, la gente se anima a venir un día o dos".
Por su parte, el presidente de la Asociación Hotelera Salou-Cambrils-La Pineda (Tarragona), Javier Roig, espera una ocupación hotelera del 85 % para los meses de julio y agosto, similar a la del año pasado, pero con mejores precios que en 2015, que fue "malo" y muchos establecimientos tuvieron que hacer importantes ofertas.
El mes de junio ha sido "correcto" en la zona, con una ocupación hotelera por encima del 70 % a precios "históricamente normales".
"Este año será mejor en la Costa Dorada que el año pasado, aunque será peor que en los años buenos", ha concluido Roig.
La Costa Dorada está teniendo un importante incremento del turismo británico, un 40 % más que el año pasado, mientras que los turistas rusos serán los mismos que en 2015 o tendrán un ligero aumento, tras la caída del 60 % registrada el pasado 2015.
Según Roig, la situación geopolítica del norte de África y Turquía ha hecho que los británicos prefieran las costas españolas.
Sin embargo, los rusos vienen menos que hace años debido a la devaluación del rublo, la crisis económica de su país y el hecho de que aprovechan las ofertas que se hacen en Turquía, en zonas que no están afectadas por el terrorismo. EFE
