MADRID (Reuters) - El ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, detalló el martes las grandes cuentas del Estado para 2007, diseñadas bajo la batuta de la cautela y la sostenibilidad y con un claro transfondo político.
"Los presupuestos son perfectamente sostenibles y coherentes con el contexto económico actual", dijo el titular en Economía.
Los grandes líneas trazadas por las cuentas públicas del año próximo incluyen una previsión de crecimiento del PIB del 3,2 por ciento, un superávit del conjunto de las Administraciones Públicas del 0,7 por ciento del PIB y la creación de 450.000 puestos de trabajo en un marco de gradual reducción de la inflación.
Las cuentas contemplan un techo del gasto no financiero para 2007 de casi 142.000 millones de euros, un 6,7 por ciento superior al del actual ejercicio.
Las previsiones de los ingresos recogen la rebaja de 4.000 millones de euros en el IRPF y en el impuesto de sociedades.
Las actuaciones productivas suponen un 7,1 por ciento del total, los servicios públicos básicos un 6,7 por ciento, la deuda pública un 5,5 por ciento y el capítulo de otras actuaciones suma un 9,3 por ciento.
Un capítulo de especial significación será el dinero que el Estado central destine a las diferentes comunidades autónomas y particularmente a Cataluña puesto que de ello podría depender el apoyo político que necesita el Gobierno central para sacar adelante las cuentas en la preceptiva tramitación parlamentaria.
En este sentido, Solbes señaló que el Estado dedicará a Cataluña unas inversiones en 2007 por un total de 3.195 millones de euros, 496 millones más que en 2006.
Con relación al presupuesto de la Seguridad Social para 2007, el Gobierno subrayó la proyección de un superávit del 0,7 por ciento a fin de afianzar la estabilidad financiera del sistema de la Seguridad Social.
/Por Manuel Ruiz/
