SEUL, 21 (EP/AP)
La Fiscalía del Tribunal Supremo de Corea del Sur ha citado a declarar el próximo lunes al presidente de Hyundai, Chung Mong-koo, en relación con un caso de presunto desvío de fondos y sobornos a funcionarios de la administración.
Mong-koo se suma así a su hijo, Chung Eui-sun, presidente de la filial Kia, que fue interrogado ayer por la fiscalía en relación con este escándalo. El máximo responsable de Kia, filial del grupo Hyundai, había recibido la prohibición de la Fiscalía de abandonar el país.
El presidente del grupo Hyundai y su hijo anunciaron el pasado martes que aportarán 1.100 millones de dólares (856 millones de euros) de sus activos propios a la compañía, con motivo del caso de presunto desvío de fondos.
La compañía pidió disculpas por el escándalo suscitado. Este anuncio se produce tras el interrogatorio llevado a cabo en las últimas semanas a directivos de Hyundai.
La investigación se puso en marcha a raíz de la detención del hombre de negocios Kim Jae-Rok, quien presuntamente recibió comisiones de millones de euros para ejercer su influencia en la Administración para la consecución de contratos y permisos para Hyundai.
Los afectados han sido arrestados por haber recibido montantes económicos de Hyundai a cambio de promesas de autorizaciones para construcción, permisos y otros favores.
A finales del pasado mes de marzo, la Fiscalía del Tribunal Supremo de Corea del Sur interrogó a otro directivo de Hyundai Motor en relación con el caso de presunto desvío de fondos y sobornos, tras la detención días antes del presidente de la filial de distribución.
En concreto, el fiscal interrogó al presidente de la división de Planes Corporativos, Chae Yang-Ki, quien se convirtió así en el primer ejecutivo de primer nivel que acude a prestar declaración en el marco de la investigación.
Tras Chae Yang-Ki, la policía surcoreana procedió a la detención del presidente de una de las filiales de Hyundai Motor, primer fabricante de automóviles del país asiático y propietario de la marca Kia, acusado de desvío ilícito de fondos para sobornar a funcionarios.
El detenido fue Lee Ju-Eun, presidente de la empresa Glovis, encargada del transporte y la distribución de los vehículos del grupo Hyundai, quien quedó bajo custodia tras las investigaciones y los registros realizados por la policía.