
Entre los requisitos indispensables para formar parte de la cartera de elMonitor, la herramienta de inversión de elEconomista, se encuentra el de contar con el consejo de compra. Linde todavía cumple con dicha premisa pero, debido al deterioro de la recomendación que está experimentando por parte del consenso de mercado que recoge FactSet, vigilamos de cerca a la alemana.
La operativa abierta en la compañía gasista está resultando muy exitosa ya que, en los dos meses que lleva formando parte de la cartera, la rentabilidad acumulada ronda el 17,5%. Y es que, desde que marcó mínimos de 2014 en el mes de septiembre en la zona de los 140,6 euros por acción, sus títulos han conseguido recuperarse cerca de un 19%, lo que la sitúa en los niveles previos a la jornada de pánico vendedor del pasado 24 de agosto conocida como el crash chino de la bolsa.
Con todo ello, la firma ha logrado un avance en lo que llevamos de año del 8,3%. Si el ejercicio acabase ahora, Linde cerraría su séptimo año consecutivo de ganancias, algo que nunca había ocurrido desde que se estrenara en el parqué en 1992.
Con dichas subidas, la firma cotiza muy cerca de los 167 euros. Pese a ello, la media de analistas que recoge FactSet todavía le otorga un recorrido alcista cercano al 10,8% ya que sitúan su precio objetivo muy cerca de la zona de los 185 euros.
Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, estima que la alemana "no verá deteriorada su situación técnica mientras no pierda los 159,45 euros por acción". Además, el experto señala que "los títulos de la compañía tienen como objetivo avanzar hasta los 175/180 euros".
Sin embargo, pese a su buen momento técnico, los analistas pueden haberse fijado en la caída de la estimación de beneficios en el año para deteriorar su consejo. Y es que, desde el pasado 1 de enero, la previsión de ganancias para la firma este ejercicio se ha disminuido un 12,7%, hasta los 1.287 millones de euros. Pese a la merma de las estimaciones, los beneficios de la alemana se situarían más de un 13,2% por encima de los 1.137 millones obtenidos a cierre de 2014. Más optimistas son para 2016 ya que estiman que Linde superará la barrera de los 1.500 millones, lo que significaría un aumento de las ganancias superior al 19%.
Estos beneficios son posibles debido a que, el pasado ejercicio, Linde destinó a ganancias casi 8,2 euros de cada 100 que ingresaba. El consenso de mercado recogido por FactSet considera que logrará mejorar su margen neto en los próximos años, con lo que lograría que 9,34 euros de cada 100 que ingresara fueran destinados a sus ganancias en 2016.
Otra de las fortalezas que presenta la estrategia es la reducción de su deuda. A cierre de 2014, Linde contaba con un pasivo que ascendía hasta los 8.420 millones. Para 2015, los expertos auguran una reducción del mismo de más de 200 millones de euros, hasta los 8.205 millones. Además, más pronunciada es la caída de la deuda pronosticada para 2016, por encima del 9%, hasta situarla en los 7.460 millones de euros.
Logrará reducir su PER hasta las 19,3 veces
Según los expertos, Linde sitúa su PER (las veces que el beneficio se encuentra recogido dentro del precio de la acción) en las 21,6 veces, lo que significa una importante reducción desde las 23 veces del ejercicio previo. Además, para 2017 estiman una normalización de esta ratio hasta las 17,7 veces. Es decir, quién adquiera un título de la compañía, tardaría poco más de 19 años en recuperar su inversión por la vía del beneficio.