Bruselas, 22 sep (EFE).- La Comisión Europea (CE) aseguró hoy que se toma "muy en serio" el escándalo del fabricante automovilístico alemán Volkswagen, que ha reconocido haber trucado los sistemas de sus vehículos vendidos en Estados Unidos para falsear los controles contra la contaminación, pero que aún considera "prematuro" opinar.
"Es una cuestión que nos tomamos muy en serio. Tenemos que ser muy claros, verdaderamente hay que aclarar los hechos y llegar al fondo del asunto", indicó en la rueda de prensa diaria de la CE la portavoz comunitaria Lucía Caudet, quien apuntó que "le debemos eso a los consumidores y al medioambiente".
La compañía automovilística alemana ha reconocido que el número de vehículos afectados asciende a once millones en todo el mundo y tienen un motor del tipo EA 189.
La portavoz señaló que la Comisión ha discutido el asunto con los Estados miembros y afirmó que "vamos a convocar en breve una reunión con las autoridades nacionales para hablar de ello", pero precisó que "es prematuro que podamos sacar conclusiones".
"Tenemos que estar completamente seguros de que la industria respeta los límites de emisiones en los coches. Estamos analizando la información de la que disponemos", dijo.
Caudet señaló que Bruselas está "en estrecho contacto" con VOLKSWAGEN (VOW.XE)y las autoridades americanas "para establecer los hechos de la retirada del mercado de ciertos vehículos".
"Estamos al tanto de las investigaciones en curso, tanto internas como externas sobre Volkswagen en Estados Unidos y en Alemania", señaló.
El pasado viernes, la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos reveló que Volkswagen utilizó software para falsear las emisiones de los modelos diesel del Jetta (2009-2015), Beetle (2009-2015), Audi A3 (2009-2015), Golf (2009-2015) y Passat (2014-2015), lo que ha afectado a más de once millones de vehículos.
Y, el domingo, el presidente del Grupo Volkswagen, Martin Winterkorn, reconoció en un comunicado las acciones de la compañía y pidió disculpas al señalar que lamentaba profundamente haber "roto la confianza" de sus clientes y del público.
El Gobierno estadounidense estudia imponer al grupo alemán una multa que podría llegar a los 18.000 millones de dólares.
Preguntada por si la CE podría sancionar de manera parecida a la compañía en el caso de que encuentre también irregularidades en Europa, la portavoz indicó que, "en términos de competencia, le corresponde a la CE definir los límites de emisiones y también los procedimientos para comprobar si esos límites se respetan".
"Pero la autoridad responsable de garantizar esos límites y que estén en conformidad con los procedimientos corresponde a los Estados miembros, que son los que tienen las herramientas para ello", agregó.
"Ello no impide que la CE de el impulso político", dijo, y aseguró que la Comisión va a "mantener el contacto con los países" para ver cómo se puede abordar el asunto, que según los informes de los que dispone el Ejecutivo comunitario "se trata de una violación de las normas".
El ministro francés de Finanzas, Michel Sapin, ya pidió hoy una investigación "a escala europea" sobre el cumplimiento por los fabricantes de vehículos de las reglas contra la contaminación tras conocerse este escándalo.
La portavoz comunitaria recordó que la CE pretende introducir nuevos procedimientos para testar el respeto del límite de las emisiones.
"Serán pruebas que en el futuro, a partir del año próximo, permitirán medir las emisiones no ya en un laboratorio, como es el caso actualmente, sino en situaciones de conducción real", comentó.