Sigue la incertidumbre en torno a Grecia y a cómo se articulará su futuro en la zona euro y las bolsas aceptan con cautela el desarrollo de los acontecimientos. Aunque ayer el Ibex 35 frenó sus alzas, los inversores no dudan en comprar bolsa y todo apunta a un final de semana alcista.
Grecia aceptó ayer someterse a las condiciones del rescate y pasar por el aro, sin embargo, Alemania quiere más y dijo "nein". Idas y venidas de las noticias que generaron volatilidad en los mercados, pero que no impidieron que las bolsas europeas volvieran a vivir una jornada positiva.
El protagonista fue el Ibex 35, que volvió a marcar máximos del año y además fue uno de los selectivos más alcistas del Viejo Continente, con un avance del 0,97%, hasta superar los 10.900 puntos. Así, el selectivo española ayer se estancó ante la resistencia intermedia de los 10.930 puntos, por encima de la cual el camino quedaría despejado hasta la gran resistencia que presenta en los 11.200 puntos, destacan los analistas de Ecotrader.
Y pese a la volatilidad de los grandes índices europeos, solo el Ftse británico acabó la jornada en negativo, con pérdidas del 0,13%. Por su parte, los inversores premiaron el "no" alemán a Atenas con un avance del Dax el 0,37%, mientras que el Cac francés se anotó un 0,71%.
Wall Street, por su parte, vivió una jornada mixta, con pérdidas en el S&P 500 y el Dow Jones y ganancias para la tecnología que se mantienen sin cambios operativos a la espera de que el selectivo industrial consiga romper resistencias.
Wall Street vuelve a cerrar plano