Nada hacía augurar a comienzos de semana la batalla encarnizada que librarían alcistas y bajistas en la bolsa, hasta el punto de poner en juego su tendencia alcista. De nuevo, las reticencias de Berlín a autorizar una política monetaria más agresiva, puestas en boca de Wolfgang Schäuble -el primer ministro alemán de Finanzas-, borraron las ganancias de la renta variable. Aunque no lo suficiente para girar su rumbo.
El Ibex 35, que cedió un 1,37% en la semana, logró mantener el soporte de los 10.680 puntos al cerrar en los 10.851 puntos. El que ha demostrado ir por libre es el euro. Perdidos los mínimos de 2013 (los 1,278 dólares), nada impidió que la divisa común protagonizara una sangría del 1% en la semana, hasta los 1,268 dólares. Su nivel más bajo desde septiembre de 2012.
La cotización del euro se encuentra en caída libre. De hecho, si nada lo impide, una vez roto el mínimo anual, el siguiente soporte se encuentra en los 1,206 dólares, que coincide con los mínimos de julio de 2012. Lo que significa que la divisa común tendría margen para caer un 5% más desde los niveles actuales. La cita del BCE del próximo jueves será clave, ya que si el organismo anuncia nuevos estímulos, como se espera, el euro podría profundizar en sus descensos. "La pregunta es clave: ¿le queda recorrido al dólar? Entendemos que sí. Cuando perdió el nivel de 1,35 tras las declaraciones de Draghi este verano, decíamos que lo más probable es que el euro se estableciera en un rango entre el 1,25-1,30. Por debajo de 1,25 ya sabemos que el BCE se pone muy nervioso y actúa", explica Miguel Ángel Paz, director de unidad y gestión de Unicaja.
Y mientras la cotización del euro sufre, quien sí aguantó el tipo al cierre semanal fue la bolsa española, que desde hace meses se mueve en un canal abierto entre los mínimos del año (los 9.725,4 puntos) y los máximos (11.187 puntos). Aunque no logra aguantar los 11.000 puntos -los volvió a tocar a lo largo de la sesión del lunes, su tendencia alcista sigue intacta. En palabras de Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, "una vez más el ataque bajista no ha podido doblegar los soportes clave que desde la semana pasada sugerimos vigilar y de cuyo mantenimiento depende que no exista un deterioro importante dentro de la actual situación técnica alcista que definen las principales bolsas europeas. En efecto, soportes como son los 3.188 puntos del EuroStoxx 50 o los 10.680 puntos del Ibex 35 siguen manteniéndose en pie y mientras esto siga así las piezas seguirán encajando en un puzle alcista", apunta.
De hecho, si existe un índice en Europa que ha soportado mejor que el resto el envite bajista esta semana dentro del Viejo Continente, ese ha sido el Ibex 35. El debate abierto en Alemania sobre el papel que juegan estímulos que planea activar el BCE -la introducir un nuevo programa de compra de ABS, entre otros- han llevado a la bolsa germana a ser la más perjudicada de Europa, al ceder un 3,15%, hasta los 9.490,55 puntos. Detrás se ha situado Reino Unido, que a partir de octubre contará en sus filas con Jimmy Choo (la firma de zapatos y complementos). A pesar de que las dudas sobre Escocia están resueltas, el Ftse 100 registró un descenso en la semana del 2,76%, que sirvió para acrecentar los números rojos que acumula en el año. Mientras que el tercer índice más bajista, entre los principales europeos, fue la bolsa francesa, que cedió un 1,49% en el cómputo semanal después de que el martes quedara confirmado el estancamiento de su economía en el segundo trimestre del año. "El hecho de ser ésta la semana posterior al vencimiento de derivados, históricamente bajista y la cercanía de niveles técnicos que se están mostrando invulnerables pueden haber jugado también en contra de las órdenes de compra", apunta Daniel Pingarrón, de IG.
Al otro lado del Atlántico, el escenario fue similar. Sólo dos de las cinco sesiones se saldaron con compras -la última, la del viernes, gracias a una positiva estimación del PIB estadounidense del tercer trimestre- y fueron insuficientes para salvar el contador en la semana. Después de que el S&P marcara un nuevo techo anual hace una semana, el índice se dejaba un 2% al cierre del mercado europeo en el balance semanal, mientras el Dow Jones se dejaba cerca de un 1%. Ni siquiera la llegada al parqué de Alibaba, que además ha sumado cerca de un 30% en su primera semana de vida bursátil, ha servido para difuminar el telón de fondo que acapara Wall Street: la progesiva normalización de la política monetaria, con la expectativa de una subida en los tipos de interés.
Bonos de Italia antes que España
Mientras tanto, en el mercado de deuda la tranquilidad continua. Eso sí, con un leve repunte del interés que se exige a la deuda española. La prueba es que esta semana la prima de riesgo, que mide la rentabilidad adicional de nuestra deuda respecto a la alemana a una década, ha repuntado 6 puntos básicos esta semana, hasta los 122 puntos. El interés del bono a una década, por su parte, apenas ha sufrido modificaciones. En los últimos cinco días ha pasado de ofrecer un 2,2% a un 2,19%. Claro que ya hay firmas, como HSBC, que lanzan la recomendación de adquirir otra deuda, como la italiana, antes que la española. ¿La razón? "Aunque después del referéndum escocés el flujo de noticias sobre Cataluña ha sido tranquilo, lo más prudente es no elevar el riesgo en el próximo mes", explican desde la firma de inversión.