Hong Kong, 24 ago (EFECOM).- El de hoy fue un mal día para la segunda telefónica de China, China Netcom, que presentó beneficios más mediocres que los del pasado año, y con ella se cayó buena parte del Hang Seng.
En un ambiente pesimista, en el que los inversores no acaban de entrever las medidas que pueda tomar China para frenar el crecimiento, este "blue chip" cayó en más de seis puntos y medio (cotiza ahora por encima del dólar y medio; 1,20 euros) y empujó al subíndice industrial y comercial, en el que se engloba, al abismo.
Al final de la tarde, este indicador cerraba un 1,75 por ciento a la baja.
Otras fichas que respiraron mal fueron las inmobiliarias, y sobre todo el gigantesco Henderson Land, que, tras caer en un 2,91 por ciento, se vende a 5,35 dólares (4,17 euros).
Las constructoras, que marcan la temperatura de este mercado, tan importante para China, perdieron en conjunto un 1,61 por ciento.
Las financieras tuvieron un día anodino, y al recoger los inversores algunos beneficios, restaron un 0,54 por ciento.
La que no tuvo tan buen día fue el Banco de Asia Oriental, criatura del diputado de Hong Kong David Li, que retrocedió en un 1,48 por ciento y cuyo valor oscila en torno a los 4,30 dólares (3,35 euros).
Tan sólo ligeramente cabe hacer referencia a las firmas de servicios, que hoy apenas se movieron.
El volumen negociado durante el miércoles fue de más de 28.000 millones de dólares de Hong Kong, nada mal para una tarde de verano, y que equivalen a más de 3.600 millones de billetes de dólar o 2.800 millones de euros.
Un vistazo a los indicadores que describen la salud de la economía china:
El "H", de empresas chinas públicas, restó casi un punto y se encuentra en 6.897 puntos.
El de las "fichas rojas", firmas chinas con grandes intereses en Hong Kong, también cayó un 1,20 por ciento. EFECOM
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