
Era uno de los pocos bancos españoles en los que los inversores bajistas, aquellos que toman prestadas acciones para venderlas y recomprarlas más tarde e intentar ganar la diferencia si el título cae, no controlaban una participación significativa. Pero este lunes la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) publicó que las posiciones cortas en BBVA vuelven a superar el 0,2% del capital, la cifra a partir de la que se comunica la participación de los bajistas.
En Banco Santander hay invertido un 0,2 por ciento a la baja, mientras que en las últimas dos semanas las posiciones cortas se han incrementando en Sabadell (del 1,89 al 2,19 por ciento), Bankinter (0,63 al 1,09 por ciento) y Banco Popular (0,98 al 1,02 por ciento).
No son los únicos valores en los que los bajistas han cobrado peso en la última quincena: han subido en otras ocho empresas, además de regresar a Carbures (con un 0,42 por ciento), Realia (un 0,31 por ciento) y Solaria (0,2 por ciento). La más atacada ha sido Indra, donde han pasado del 5,43 al 6,12 por ciento. Se mantiene así como la segunda compañía española con más posiciones cortas, solo por detrás de Meliá Hotels (14,79 por ciento).
Pierden peso
Hasta 20 valores han logrado el efecto contrario. Los bajistas ya controlan menos del 0,2 por ciento en Abertis, donde desaparecen por primera vez desde febrero del año pasado. También pierden participación en Viscofan y Abengoa, dos de los cinco valores preferidos de este tipo de inversores. En la primera, el dato disminuye del 4,4 al 3,46 por ciento y en la segunda, del 3,69 al 3,17 por ciento. Tubacex, Enagás, Gamesa y Técnicas Reunidas son otras de las compañías en las que más se han reducido en las últimas dos semanas.