Ha sido la última empresa española en sumarse a la moda imperante de retribuir al accionista con scrip dividend. Esto es, una modalidad de pago flexible, en la que se amplía el capital para retribuir con acciones nuevas a los inversores que no soliciten expresamente cobrar el dividendo en efectivo. El resultado: mantienen su participación en el capital de la firma pero se quedan sin retribución. Si cobra el dividendo, su participación en el beneficio de la misma se reduce.
En concreto, la compañía que preside Rafael del Pino anunció el pasado jueves que propondrá en la junta de accionistas del próximo 26 de junio dos ampliaciones de capital para sus próximos dos dividendos: una por valor de 220 millones de euros, para pagar el dividendo complementario del ejercicio de 2013, y otra de 293 millones como máximo, para la retribución a cuenta de los resultados de 2014.
Según las estimaciones del consenso de mercado recogido por Bloomberg, el dividendo complementario que la compañía paga normalmente en mayo, esta vez se espera para el próximo mes de julio. Y será un pago, para quienes opten por el efectivo, de 0,30 euros por acción, lo que supone una rentabilidad, a precios actuales, del 1,94%. No en vano, esta práctica, que amplía el número de acciones en circulación, supone una dilución de las ganancias para el accionista que cobre su dividendo en metálico.
Para compensarla, Ferrovial también ha anunciado una reducción del capital de un 3,5% como máximo, mediante la recompra de hasta 25,67 millones de acciones propias y su posterior amortización a través de un programa que plantea una inversión máxima en acciones propias de 350 millones de euros.
Con la intención de emprender el camino contrario, la petrolera Royal Dutch Shell va erradicar el scrip para "permitir un programa de retribución más eficiente". La compañía ha anunciado esta semana que sus planes, tanto para el segundo pago de 2014 como para los futuros, pasan por retribuir al accionista con dinero en metálico. El mes pasado, la petrolera declaró un dividendo de 0,47 dólares por acción a cuenta de los resultados del ejercicio pasado, lo que supone un 4% más que el año anterior, cuando pagó 0,45 dólares por título.
Pero no es la única que lo hace
No obstante, conviene recordar que esta modalidad de pago ya la utilizan otras compañías como Telefónica, BBVA, Santander, Iberdrola, Repsol o Acerinox, entre otras. Precisamente, la teleco sorprendió al mercado el pasado mes de marzo, al anunciar un nuevo cambio en su política de retribución, con esta fórmula que pocos esperaban que volviera a emplear. El primer pago de 2014, de 0,35 euros por acción, lo distribuirá bajo scrip el próximo mes de noviembre, mientras que sólo repartirá en metálico el segundo, que habitualmente se entrega en mayo del año siguiente, y será de 0,4 euros por acción.