
Barcelona, 18 may (EFE).- La multinacional israelí ICL, a través de Iberpotash, invertirá finalmente "unos 800 millones" hasta 2020 en Cataluña, en lugar de los 600 anunciados inicialmente, para llevar a cabo el llamado plan Phoenix, que consiste en el desarrollo industrial de la cuenca minera de la comarca del Bages (Barcelona).
En una entrevista con Efe, el consejero delegado de Iberpotash y presidente de ICL Iberia, José Antonio Martínez Álamo, también ha asegurado que, además de la planta de sal prevista en Súria, la multinacional construirá "una segunda planta en Sallent" que servirá para "reducir" el volumen de la montaña de sal del Cogulló, generado por décadas de actividad minera y que tiene una dimensión similar a la montaña del Tibidabo de Barcelona.
El directivo de Iberpotash ha afirmado que la inversión del Plan Phoenix, una de las principales inversiones industriales que hay en marcha actualmente en España, crecerá sustancialmente porque a la cantidad prevista en un principio se añadirán "unos 170 millones de euros en desarrollo logístico".
Esta cifra incluye los 100 millones de euros que se destinarán a construir la nueva terminal de carga del Puerto de Barcelona y otro paquete de inversiones que se usará para mejorar las instalaciones actuales en Súria: en concreto, se ampliarán las zonas de carga y descarga de materia prima (tanto potasa como sal) y su salida a través del ferrocarril.
Iberpotash es la única empresa productora de sales potásicas en España, un fertilizante natural básico para la agricultura, y también es un actor importante en el mercado de la sal, dado que la sal es un residuo generado por la potasa.
Para reforzarse en el mercado de la sal y reducir al mismo tiempo los residuos de la actividad minera, Iberpotash ya tiene listos los cimientos de lo que debe ser la planta de sal más moderna del mundo, que se ubicará en Súria (Barcelona) y espera que esté en marcha "a finales de 2015".
Esta planta prevé producir unas 750.000 toneladas anuales de sal de máxima calidad -con una pureza del 99,97 % - destinada a la industria electroquímica, e Iberpotash construirá otra planta de sal con la misma capacidad de producción en Sallent (Barcelona).
Martínez Álamo ha asegurado que, con estas dos plantas, Iberpotash se compromete a no seguir aumentando el volumen de sal acumulado en la escombrera del Fusteret, en Súria, y a "comenzar a reducir la montaña" de sal del Cogulló, en Sallent, aunque no ha querido especular sobre cuánto tiempo haría falta para hacer desaparecer esa última escombrera si ha dicho que serán muchos años.
Relacionados
- Suiza vota en referéndum si eleva el salario mínimo a 18 euros la hora
- Suiza vota mañana en referéndum si eleva el salario mínimo a 18 euros la hora
- Turquía eleva a 301 las víctimas mortales en una explosión minera
- Moody's eleva la calificación crediticia de Irlanda tras el fin de rescate
- Moody's eleva la calificación crediticia de Irlanda tras el fin de rescate