
Las tradiciones a veces también están para romperse. Y es que si normalmente los inversores no hacían las maletas en Semana Santa con las consiguientes subidas para el Ibex 35, en los últimos años esta tendencia ha cambiado.
Así lo demuestran los últimos datos, ya que tanto en el periodo de 2012 como de 2013 el selectivo español arrastró su cruz y registró caídas superiores al 4% -el año pasado por esas fechas la Comisión Europea reconoció la posibilidad de forzar a los depositantes con más de 100.000 euros a asumir pérdidas, como ocurrió en Chipre-.
De momento, el índice de referencia de España no ha empezado con buen pie unas fiestas en las que la bolsa permanecerá cerrada durante el viernes y el lunes. Basta con echar un vistazo a la sesión que protagonizó ayer, en la que llegó a caer más de un 2%.
¿Cuáles serán las cofradías a las que más les pesarán sus pasos? El sector bancario parece que es el que tiene por delante un recorrido más duro, ya que en los últimos dos ejercicios ha sido uno de los sectores más asediados por las ventas. A este respecto, los siete bancos cotizados del Ibex (IBEX.MC) perdieron de media más de un 6% en 2012, cifra que el año pasado ascendió al 10,6% -sólo Bankia se dejó más de un 34%-.
Eso sí, no sólo el Ibex 35 ha tenido penitencia en los últimos dos años, ya que los principales índices de Europa también llevaron a hombros fuertes caídas. En 2013 fue el Ftse Mib italiano el más castigado con un descenso del 3,25% -el ejercicio anterior llegó a caer cerca de un 5%-, mientras que el EuroStoxx 50 y Cac 40 galo retrocedieron más de un 2% en 2013 y más de un 3% en 2012.
¿Continuará el vía crucis?
Al margen de lo que ocurra en Semana Santa lo cierto es que, de momento, las últimas jornadas están siendo un via crucis para el Ibex 35. A pesar de que desde los máximos marcados a principios de abril el selectivo ya cae cerca de un 5 por ciento, el PER -número de veces que el precio recoge el beneficio- continúa siendo el más elevado de Europa, -16,6 veces-.
¿A qué se debe? Pues la razón hay que buscarla en los beneficios, ya que las mejoras no terminan de llegar. Aunque el consenso de mercado espera que las ganancias conjuntas del Ibex 35 superen en un 70 por ciento a las de 2013 -algunas compañías como ArcelorMittal o FCC pasarían de pérdidas a ganancias-, desde que comenzó el año estas perspectivas se han deteriorado un 5,4%.
De este modo, si a principios de año se esperaba un beneficio conjunto de 34.300 millones de euros, ahora los expertos estiman que el índice obtenga 32.500 millones.
