BRUSELAS, 18 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea confirmó hoy el hallazgo de un brote de la enfermedad vírica "lengua azul" -fiebre catarral ovina-- en varias ovejas en el sur de Países Bajos, el primer caso en el norte de Europa de una patología más habitual en el sur, como España o Italia.
La portavoz comunitaria Antonia Mochan informó de que "estamos investigando el caso en el Laboratorio de Referencia Comunitario de Pirbright, Reino Unido, para establecer la virulencia de la enfermedad", aunque en cualquier caso apuntó que "la enfermedad de la lengua azul no afecta a los humanos, y no hay riesgo de que se contraiga a través de la leche o la carne".
A pesar de ello, las autoridades holandesas han detenido ya todo el comercio de rumiantes vivos, de su semen, embriones u óvulos, y ha establecido una zona de cuarentena de 20 kilómetros alrededor del lugar donde se ha localizado el brote.
Por su parte, la Comisión Europea ha comenzado ya a investigar en profundidad la cepa y esta mañana se reunió con las autoridades holandesas y de otros Estados miembros vecinos para evaluar la situación y analizar las siguientes medidas a tomar.
Mochan anunció también la convocatoria de una reunión extraordinaria del Comité de Cadena Alimentaria y Salud Animal el próximo lunes, en el que se discutirá la adopción de "otras medidas permitidas por la legislación comunitaria" en estos casos. A este encuentro acudirán también otros estados vecinos de los Países Bajos, que podrían verse afectados por las decisiones que tome el Comité.
En dicho encuentro, la Comisión podría prohibir la exportación de rumiantes, su semen, óvulos o embriones desde toda la zona afectada, lo que incluiría a estados vecinos de Países Bajos.
Asimismo, podrían establecerse zonas de protección en los 100 kilómetros y zonas de vigilancia de 50 kilómetros a la redonda de las granjas afectadas y también podrían tomarse medidas especiales para la erradicación y control de la enfermedad.
La lengua azul es una enfermedad viral que se transmite a través de la picadura de los insectos, y que afecta a los rumiantes domésticos y salvajes. Los Países Bajos son el primer país del norte de Europa en el que se registra esta enfermedad, más habitual en estados del sur como España o Italia. Un experto italiano colabora ya con las autoridades holandesas en la evaluación de la situación.