
El año llega cargado de estrenos. Primero fueron las nacionalizadas BMN y Bankia y ahora es Acciona quien acude por primera vez al mercado de capitales para buscar financiación. La compañía aborda una emisión de bonos convertibles que no solo abre un nuevo camino para obtener recursos, sino que le conduce a reducir a casi la mitad los costes a los que actualmente consigue financiarse.
Acciona anunció una emisión de bonos convertibles con la que captará al menos 325 millones de euros -puede conseguir otros 50 millones más si los bancos colocadores (HSBC, Crédit Agricole, Société Générale y Royal Bank of Scotland) ejercen su derecho a comprar esta cantidad-. La operación vence en 2019 y durante estos cinco años los bonos ofrecen cupones del 3% anual al inversor, pagaderos semestralmente a finales de cada enero y cada julio. Este coste del 3% es inferior al 5,6% medio al que la compañía financia su elevada deuda con entidades bancarias -sus compromisos financieros suponen unas 5,7 veces el beneficio bruto-.
Es una de las grandes ventajas que encuentran las compañías en el mercado. Amplían sus fuentes de financiación y, además, a mejores condiciones. Así lo explicó Acciona, al indicar que algunos de los fines son "extender el perfil de vencimiento de la deuda y reducir el coste medio de financiación, aumentando la liquidez y diversificando las fuentes de financiación".
La emisión confirma así dos pronósticos para 2014. El primero, que este año acudirán al mercado nuevos emisores en España en la medida en la que se mantenga abierta la ventana de liquidez. Y el segundo, que la emisión de bonos convertibles seguirá creciendo este año ante el apetito de los inversores por este producto. "Prevemos una fuerte demanda institucional de convertibles ya sea de forma independiente o como componente básico estable para las carteras de renta fija", señala Martin Kuehle, director de inversiones en bonos convertibles de Schroders. En este caso, la emisión no se ha ceñido estrictamente al institucional, si bien se trata de inversores cualificados por la complejidad de este tipo de deuda.
El diseño de la operación
El precio fijado para la conversión es de 63,02 euros, es decir, que la operación tiene una prima del 32,5% frente al precio medio al que cotizaron las acciones durante el tiempo que transcurrió entre que la compañía lanzaba la operación y fijaba las condiciones finales. El título retrocedió un 1,86%, hasta los 47,45 euros.
Con estas cifras sobre la mesa, la emisión supone que si en las fechas previstas todos los inversores quisieran canjear la deuda por acciones, Acciona debería entregarles 5,15 millones de títulos, un 9% del capital actual.
A priori, la operación, por tanto, puede acarrear una dilución para los accionistas si efectivamente se tienen que emitir acciones para quien solicite el canje, pero los bonistas no tienen que convertir la deuda obligatoriamente. "Lo habitual es que los inversores que compran los bonos no tengan vocación de accionistas. Es decir, que aunque en el momento del vencimiento las acciones superen el precio de conversión, no hay que olvidar que estos bonos cotizan y que el objetivo no suele ser el canje", apuntan fuentes de mercado.
Y, por otro lado, "la compañía podría alargar la vida de esta deuda y conservarla en mercado para así mantener reducidos sus costes de financiación", apuntan estas fuentes, con lo que de ninguna manera se espera que haya que repartir tantas acciones en 2019.
Es más, la operación está diseñada de forma que, aunque en el peor de los escenarios tuviera que hacerse una ampliación, ni siquiera la dilución haría tambalear el control que mantiene ahora mismo la familia Entrecanales, cuya participación ronda el 60%.
Incluso si al final Acciona tuviera que entregar los títulos, no tendría que ampliar capital y diluir a los accionistas, ya que entre otros recursos las cotizadas cuentan con la opción de tener hasta un 10% de autocartera -Acciona dispone ahora del 0,063%-.
Es a lo que recurrió, por ejemplo, FCC, que compró acciones propias hasta este límite de autocartera para proteger a los accionistas de referencia del canje de los bonos convertibles de la compañía.