La prima de riesgo de la deuda española, el diferencial entre los bonos a diez años españoles y su homólogo germano, el bund, continúa con su descensos y se sitúa por debajo de los 180 puntos, un nivel que no dejaba atrás desde abril de 2011. En concreto, ha tocado los 178 puntos básicos.
El motivo principal es la pronunciada bajada de la rentabilidad del bono a una década en el mercado secundario, donde se cotiza al 3,698%, su cota más baja desde el mes de diciembre de 2006.
Hoy se celebra la primera reunión del año del Banco Central Europeo (BCE) y, según apuntan algunos analistas, no se descarta que la institución que preside Mario Draghi anuncie una nueva operación extraordinaria de inyección de liquidez a los bancos. No se espera, eso sí, que anuncia una nueva bajada de los tipos de interés ni que sitúe la facilidad de depósito de la banca en terreno negativo.
"Los alcistas confían en un BCE muy flexible, ya que tendrá que empezar a luchar contra la deflación este año. A largo plazo, esperamos medidas más expansivas por parte del BCE y ese es uno de los principales elementos que está impulsando la rentabilidad de los europeos", indica a Reuters Philippe Gijsels, de BNP Paribas Fortis Global Markets.
