San José, 8 ago (EFECOM).- El embajador de Costa Rica ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ronald Saborío, culpó hoy a los países proteccionistas de la "crisis" que atraviesa la Ronda de Doha para la liberación del comercio.
"La Unión Europea debía mejorar el acceso a mercados, Estados Unidos reducir los subsidios agrícolas y la India y Brasil bajar los aranceles industriales, pero prevalecieron intereses proteccionistas de todos ellos. Todos son culpables", afirmó Saborío en conferencia de prensa.
La Ronda de Doha, que comenzó en el 2001 con el fin de profundizar la liberalización comercial y beneficiar a los países menos desarrollados, suspendió indefinidamente sus deliberaciones el pasado 24 de julio en Ginebra, ante la falta de acuerdo sobre la apertura de mercados agrícolas e industriales.
Para Saborío, la única salida para destrabar las conversaciones es que los países proteccionistas bajen sus duras posiciones y piensen en la liberalización del comercio, el objetivo principal de la ronda.
Según el embajador costarricense, la OMC vive una situación "difícil" y advirtió de que si el detenimiento "en seco" de las negociaciones hace fracasar la Ronda los países latinoamericanos y los que se encuentran en vías de desarrollo sufrirán "graves" consecuencias.
Si la ronda fracasara los países iniciarían una "carrera" para firmar tratados de libre comercio, escenario en el cual "Latinoamérica perdería la batalla ante mercados como los asiáticos", aseguró.
Otras de las consecuencias anunciadas por Saborío son la pérdida de facilidades al comercio, ventajas arancelarias, mejoras en acceso a mercados y beneficios para países pobres que ya se han alcanzado dentro de la ronda.
Sin embargo, se mostró esperanzado en que se reactiven las negociaciones, pues se han empezado a dar señales como la anuencia de Estados Unidos a sentarse de nuevo en la mesa y las reuniones que efectuaran el próximo mes el Grupo de Países en Desarrollo (G-20), así como el Grupo de Kerns.
"Ha habido un entendimiento de lo que se puede perder si la ronda fracasa", pues se tiene previsto generar ganancias por 280.000 millones de dólares en los primeros diez años de implementación de los acuerdos que se tiene previsto alcanzar, explicó Saborío.
Según el diplomático costarricense, la tercera parte de esas ganancias llegarían a los países en desarrollo, muchos de ellos latinoamericanos, lo que contribuiría a disminuir la pobreza y mejorar los indicadores de desarrollo humano. EFECOM
dmm/rsm/esc/jla