Raimundo Díaz
Madrid, 3 ago (EFECOM).- Malos datos empresariales y tensiones inflacionistas en Estados Unidos. Este fue el cóctel del que bebieron hoy las bolsas internacionales, que no tuvieron más camino que el de los números rojos.
El guión no dejaba lugar a ninguna duda y los inversores comenzaron a deshacer posiciones cuando, todavía a media sesión en Europa, despertó el gigante neoyorquino con malos resultados para compañías como Sprint, la tercera mayor compañía de telefonía móvil de EEUU, el fabricante de equipos médicos Medtronics o la cadena de cafeterías Starbucks.
Pero el verdadero miedo de los inversores no radica en que algunas compañías no cumplan con lo esperado, sino la reciente aparición de algunos datos macroeconómicos que advierten de tensiones inflacionistas en la mayor economía del mundo.
¿Qué hará entonces la Reserva Federal? Esa es la pregunta que se hacen todos los operadores del mercado y, ante la duda, pues lo lógico: tomar algunos beneficios y esperar.
En España, el Ibex-35 cedió un 0,53 por ciento, aunque logró mantener por los pelos los 11.800 puntos, en una reacción que se produjo casi en los últimos compases de la sesión, en la que sólo el BBVA, entre los grandes valores, consiguió repetir cotización y no perder nada.
Por el contrario, el resto de los grandes (Santander, Telefónica, Repsol, Endesa e Iberdrola) se anotaron recortes, que no superaron en ningún caso el punto porcentual.
Iberia y Metrovacesa fueron las cotizadas del Ibex-35 que más subieron, con avances del 1,04 y 0,79 por ciento, mientras que siguen las apuestas de muchos inversores sobre el sector inmobiliario, lo que provocó que en esta ocasión Riofisa ganara un 6,76 por ciento.
La subida de tipos acordada por el BCE, que ha fijado el precio oficial del dinero en el 3,00 por ciento, así como las advertencias de Trichet sobre nueva alzas, eran elementos que ya descontaban los mercados y pasaron sin apenas incidencia en las bolsas. EFECOM
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