Es la tercera entidad española que permite operar con renta fija mediante su propia plataforma a través de Internet
Muchos inversores particulares esperan que comprar y vender letras del Tesoro en el mercado tarde o temprano sea igual de sencillo que operar con acciones de Telefónica. Desde ayer, Bankinter se une a la iniciativa de acercar esta posibilidad al minoritario a través de una plataforma online en la que ofrece emisiones de deuda pública y privada españolas y extranjeras.
Es la segunda entidad, tras Auriga Bonos y Renta 4, que proporciona su propio sistema para que los clientes del banco puedan comprar y vender en el mercado secundario, en el que se negocian los títulos después de ser emitidos. El inversor solo necesitará una cuenta corriente y una cuenta de intermediación en Bankinter y a partir de ahí puede operar en Internet a través de la plataforma eligiendo tanto el importe como el precio al que quiere realizar el movimiento. Entre otras cosas, el sistema permite fijar órdenes con precios límite para que la entidad encuentre en el mercado un precio igual o mejor, nunca peor, y estas órdenes se mantendrán por un máximo de siete días.
Bankinter ofrece desde ayer más de 800 emisiones de deuda al particular. La mayoría, un 76%, corresponde a papel lanzado por empresas. También se pueden encontrar hasta 58 emisiones de deuda pública española.
Eso sí, para operar a través de esta plataforma el cliente tendrá que hacer inversiones mínimas en función del tipo de títulos. Para comprar letras, bonos y obligaciones del Tesoro Público español el importe debe alcanzar al menos los 15.000 euros; para deuda privada de empresas españolas, el mínimo es 50.000 euros; para emisiones de títulos emitidos por el ICO, 20.000 euros; y para deuda pública y privada extranjera, 50.000 euros.
Con paso lento y ¿firme?
La iniciativa de Bankinter llega cinco meses después de que BME pusiera en marcha el Sistema Electrónico de Negociación de Deuda (Send) en abril, con el que se pretendía facilitar al particular el acceso a un mercado reservado a inversores institucionales por los elevados importes de entrada y la existencia de opacas comisiones. Sin embargo, el balance hasta la fecha es que, salvo excepciones, como la de Bankinter, Auriga o Renta 4; el resto no da la operativa electrónica (Ahorro Corporación permite ver precios reales, pero no dar órdenes online).