Barcelona, 2 ago (EFECOM).- Los partidos catalanes han culpado hoy en la Diputación Permanente del Parlament a AENA, y en menor grado a Iberia y al Gobierno, del conflicto producido en el Aeropuerto de Barcelona, y han exigido el traspaso de su gestión, mientras que el ejecutivo catalán ha sido acusado de inhibirse.
La Diputación Permanente del Parlament ha mantenido esta mañana una reunión en la que han comparecido cinco consellers: Política Territorial -Joaquim Nadal-, Economía -Antoni Castells-, Interior -Montserrat Tura-, Salud -Marina Geli- y Trabajo -Jordi Valls- y en la que también se ha aprobado una solicitud de comparecencia del delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel.
Nadal ha asegurado que el conflicto se hubiera podido "evitar" si Iberia hubiese dado garantías e información suficiente a sus trabajadores sobre la pérdida del concurso del servicio de "handling" (asistencia en tierra) en el aeropuerto.
La consellera Montserrat Tura ha revelado que la Generalitat ofreció la ayuda de los Mossos d'Esquadra y de Protección Civil al Gobierno tras la ocupación ilegal de las pistas del aeropuerto, pero ha dado a entender que esta oferta no fue aceptada por la Delegación del Gobierno.
Por parte de los partidos, el líder de CiU, Artur Mas, ha calificado de "absolutamente lamentable" la actuación del Gobierno en la gestión de la crisis de El Prat y ha asegurado que la Generalitat tampoco "ha estado a la altura de las circunstancias" en la resolución de un conflicto que ha dañado la imagen de Cataluña.
El portavoz de CiU, Felip Puig, ha considerado, además, que el ejecutivo catalán "está agónico" y "ha batido el récord mundial de incompetencia" en el conflicto, y se ha preguntado si, ante una emergencia similar, no cabía la posibilidad de llamar al ejército.
Por parte de ERC, su presidente, Josep Lluís Carod-Rovira, ha acusado al gobierno catalán de "falta de valentía" y de no haber "dado la cara" en una crisis en la que ha habido un total e "inadmisible" "vacío de poder" en la Generalitat.
Tanto Carod, como Puig y el líder del PPC, Josep Piqué, han coincidido en lamentar la ausencia del presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y la del ministro Montilla, y en el caso del líder republicano se ha preguntado de qué sirve tener un gobierno y una policía propios "si en temas como éste no podemos hacer nada".
El líder del PPC, Josep Piqué, ha exigido que cese el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, "por su absoluta incompetencia", y ha advertido de que durante el conflicto "el gobierno de la Generalitat no existía".
Para Piqué, resulta difícil entender "por qué no se reunió la Junta de Seguridad de Cataluña", y que el presidente de la Generalitat haya estado ausente durante la crisis.
Por parte de los grupos que apoyan al gobierno catalán, el portavoz del PSC, Miquel Iceta, ha criticado el papel desempeñado por AENA e Iberia en el conflicto, pero ha negado la necesidad de una carga policial, y ha pedido que no se aplace más el debate sobre el traspaso de la gestión de los aeropuertos.
Según el portavoz del PSC, el origen de las responsabilidades sobre la crisis no se encuentra en el gobierno de Cataluña, sino que hay que buscarlas "en AENA e Iberia" y, respecto a las cuestiones de orden público, en el ministerio del Interior.
Iceta ha precisado que "la opinión pública tiene derecho a conocer las causas" del conflicto, así como "a penalizar no sólo a los responsables directos, sino también a los de Iberia y AENA".
El portavoz de ICV, Joan Boada, ha anunciado que su partido exigirá las responsabilidades y las dimisiones "que hagan falta" a AENA y al ministerio de Fomento por su gestión en la crisis.
Para Boada, los principales responsables son AENA, que ha actuado con una serie de decisiones "erráticas y lentas", e Iberia, que mantiene un largo conflicto laboral con sus trabajadores.
La Diputación Permanente votará el viernes 11 de agosto las propuestas de resolución sobre el conflicto y, además, cabe la posibilidad de que en la misma reunión comparezca el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel.
En otro ámbito distinto, el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, ha opinado que una huelga salvaje como la que bloqueó el aeropuerto "no hubiese sido tolerada" por las autoridades en Madrid-Barajas. EFECOM
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(Con fotografía)