MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
Tanto empresas como consumidores desean que los Gobiernos en egenral "haga más" por conseguir que tanto los productos como el consumo en general sean más ecológicos y sostenibles, según se desprende de un reciente estudio titulado 'Yo haré si tu haces: hacia un consumo responsable', recogido hoy por 'Ethical Corporation', y donde se analizan una serie de grupos de ciudadanos y empresas, así como la forma en que se producen y venden los productos 'verdes'.
El coordinador de la Mesa Redonda para el Consumo Sostenible de Reino Unido, Alan Knight, --entidad que ha realizado el citado estudio--, afirmó en este sentido que los consumidores opinan en general que "no es fácil" llevar un estilo de vida sostenible, además de pedir ayuda para poder hacerlo, mientras que los empresarios, por su parte, aseguran que "harían más si fuera más fácil".
Asimismo, afirmó que los investigadores de este estudio han propuesto sugerencias al Gobierno en este sentido. Éstos plantean la necesidad de una legislación para apoyar diversas políticas y actividades relacionadas con la sostenibilidad, explicó Knight.
Además, los consumidores y las empresas expresan su deseo de más información con el fin de crear 'espacios de cambio', ya que según ellos, ni el contexto, ni el caso, ni la necesidad para llevar a cabo un consumo más sostenible "estáN suficientemente claros". A su juicio, este cambio es imprescindible y los Gobiernos "no están haciendo nada para conducir este cambio".
En Reino Unido, hogares, trasnporte, alimentación o vacaciones son los causantes de más del 80% de los impactos ambientales. ¿Sugerencias?: crear políticas que acaben con el pragmatismo de los consumidores en este sentido y que apuesten por sistemas comerciales y procesos de producción más simples.
El estudio concluye asimismo que los Gobiernos "no pueden simplemente proponer sistemas de compras públicas y quedarse cruzados de brazos, sin implicarse de verdad en una auténtica política de sostenibilidad". Otra de las conclusiones del informe recalca la importancia de demostrar a los consumidores que el aspecto ambiental es muy importante, y cómo ellos individualmente "pueden marcar la diferencia".
En sus viajes en avión, en las calefacciones o aires acondicionados de sus hogares, etc, esa diferencia "se marca con la reducción, --con prácticas sencillas y cotidianas--, de las emisiones de CO2 a la atmósfera". Además, desde el consumo diario en el supermercado, la gasolinera o las compras más habituales "también se puede apostar por la responsabilidad y la sostenibilidad", explicó Knight.
En este sentido, el estudio concluye que el principal rol de las empresas y los Gobiernos, debe ser en general "hacer mucho más de lo que hacen actualmente para apoyar a los consumidores en esta materia", con el fin de "hacérselo mucho más fácil".