BRUSELAS, 28 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea adoptó hoy por primera vez un paquete de propuestas para crear una lista segura de enzimas, aromas y aditivos que pueden ser utilizados en los productos alimentarios en la Unión Europea, basada en la opinión científica de la Autoridad Europea de la Seguridad Alimentaria (EFSA). También el sistema de etiquetado requerido para cada sustancia será incluido en la legislación.
Se trata de actualizar conforme a los últimos desarrollos cientúficos y tecnológicos aquellas reglas sobre aditivos y aromas que ya están cubiertos por legislación comunitaria, explicó en un comunicado. Por lo que respecta a las enzimas, éstas serán incluidos por primera vez en una ley europea que armonizará las diferentes legislaciones nacionales.
Además, Bruselas pretende introducir un procedimiento común a todos los Estados miembros para que puedan aprobar la presencia de nuevos aditivos, contando para ello con una evaluación científica de EFSA. Esta decisión evitará problemas derivados de diferentes políticas al respecto en el mercado único.
El objetivo de esta proposición, en palabras del comisario de Salud y Protección del Consumidor, Markos Kyprianou, es "asegurar que las reglas están basadas en criterios científicos y que los consumidores tienen el mismo nivel de seguridad en cualquier lugar de la Unión Europea".
La Comisión reconoce la importancia de los aditivos alimentarios en el actual sistema productivo, así como su utilidad para conservar el sabor y la frescura de los alimentos. No obstante, apunta que deber ser controlados con "reglas claras y armonizadas sobre la aprobación y el marketing de estas sustancias" para "para proteger al consumidor y para aumentar la confianza pública en los productores", añadió el comisario.
ENCIMAS, ADITIVOS Y AROMAS.
Una vez la Comisión haya establecido las normas que se aplicarán a las enzimas alimenticias, EFSA analizará y evaluará durante 24 meses diferentes tipos de estos componentes que se utilizan en el sector. Los que sean incluidos en la lista segura deberán aparecer en las etiquetas de los productos junto con su función específica.
Aditivos y aromas sólo serán objeto de una actualización, de manera que se reevaluarán los niveles máximos permitidos y se estudiará el riesgo que representan para la salud humana. El etiquetaje de este tipo de sustancias como "naturales" quedará además mucho más restringido.