Bankia se prepara para una masiva salida de papel cuando el próximo 28 de mayo empiecen a cotizar las nuevas acciones fruto de las dos simultáneas ampliaciones de capital para dar entrada al Fondo de reestructuración ordenada bancaria (Frob) y a los tenedores de deuda.
A diferencia de Liberbank, donde la menor dimensión de la operación permitió elaborar un mecanismo previo a la salida a bolsa que daba la oportunidad a los inversores de una retirada ordenada, Bankia ha optado por no utilizar ninguna fórmula para frenar la avalancha vendedora de la conversión de deuda por acciones, en torno al 30 por ciento del capital.
El procedimiento utilizado por Liberbank (conocido como sales facility) permitió drenar la salida acelerada de inversores que provenían de las convertibles y subordinadas desde el 25 por ciento que esperaba la CNMV hasta el 1,6 por ciento. La participación mayoritaria del capital queda en manos de Cajastur, Caja Cantabria y Caja de Extremadura. En el caso de Bankia será el propio mercado el que únicamente actúe y ponga precio a las acciones del banco en bolsa cuando en una semana lleguen al mercado más de 11.000 millones de acciones.
Los expertos consultados por elEconomista coinciden al señalar que lo más probable es que los nuevos accionistas del banco, procedentes del canje de los productos híbridos, acudan al mercado a vender las acciones recibidas y éstas caigan al menos hasta los 1,35 euros -precio de la ampliación para el Frob-.
Tras la operación se estima que en torno al 30 por ciento del capital estará en manos de los accionistas procedentes de las preferentes y deuda subordinada (productos híbridos) y que los antiguos accionistas representarán menos del 1 por ciento del capital. El resto, cerca del 70 por ciento, estará controlado por el Frob. En el caso 'lógico' de que nadie haya acudido a la ampliación, los accionistas minoritarios tendrían solo 10,25 millones de acciones, lo que supondrían solo un 0,1 por ciento del capital, y BFA tendría el 67,25 por ciento.
El único as que tiene guardado la entidad nacionalizada para defenderse si se produce un "escenario de exceso de órdenes de venta o flow back" es que BFA se reserva la intención de comprar acciones de Bankia por hasta 275 millones de euros con el fin de incrementar su participación y dotar al mercado de liquidez en ese contexto. Esta cantidad podría suponer hasta un 1,75 por ciento del capital en el caso de que la capitalización ascienda a 15.878 millones de euros. Cálculo que tiene en cuenta el número de títulos que habrá en mercado y el precio al que amplía capital el Frob (es decir, los 1,35 euros).
Su acción se hunde un 46%
Las acciones de Bankia protagonizaron ayer la mayor caída en bolsa desde su estreno en julio de 2011. Se desplomaron un 45,72 por ciento, hasta los 2,34 euros, aunque durante la sesión la presión vendedora llevó al valor a ceder hasta un 48,25 por ciento. Estos descensos no pillan por sorpresa al mercado. En el período de suscripción preferente, que concluyó el pasado 14 de mayo, ya se comprobó el escaso apetito por las acciones de la entidad al cerrar con pérdidas para el accionista del 63 por ciento.
Además de la continua advertencia de los analistas, la CNMV alertó también por escrito de los riesgos que conllevaba invertir en el valor. "Las acciones de Bankia, tras la ampliación de capital, pueden sufrir una considerable pérdida de valor como consecuencia de su elevadísimo número y el juego de la oferta y demanda", especificó el regulador español.