El diferencial están en niveles interesantes para fijarse en emisores ligados al riesgo país.
Poca actividad en el mercado secundario, mientras continúan los recelos sobre la situación económica de la eurozona. Ya no sólo de los países periféricos, también de otros países como Francia. Además, el mercado está pendiente de las medidas que implementará Italia tras las elecciones, y la decisión de la Reserva Federal (Fed) sobre la continuidad de la política expansiva (QE3), que están marcando la actividad de todos los mercados, tanto de renta variable como renta fija y divisas. La referencia a diez años española sigue en el entorno del 5,20%, mientras que en Alemania ha vuelto a bajar, hasta el nivel del 1,60%, lo que vuelve a convertir la deuda alemana en activo refugio.
Esta semana no hay ninguna subasta de deuda pública en España, la próxima no será hasta el 7 de marzo. El Tesoro ha comenzado el año con grandes emisiones, para evitar problemas que puedan surgir a medida que avance el ejercicio. Aprovecha el momento de liquidez y la entrada de capital para captar las cifras que quiere emitir.
Hasta la fecha, el Tesoro ha captado casi 50.000 millones en 2013, la misma cantidad que en todo el año 2007. Para esta semana, sobre todo en los primeros días, estaremos pendientes de las interpretaciones que haga el mercado sobre el resultado de las elecciones italianas, dada la relación estrecha entre nuestra economía y la italiana.
Pese a la dificultad de decidir el momento idóneo de entrada en la deuda a corto plazo, los niveles actuales de diferenciales nos parecen suficientemente atractivos como oportunidad de compra a medio plazo. La economía española está dando señales de mejoría, y la prima de riesgo tiende a disminuir. Además, no son previsibles cambios importantes cambios a medio plazo en los tipos.
Pendientes de la banca
Por tanto, es momento de emisores ligados al riesgo España, como son las del ICO o Fade. También nos gusta el sector financiero, entidades de países periféricos pero con altos niveles de solvencia, tales como Santander, BBVA y La Caixa.
El sector financiero vuelve a tomar protagonismo con la nueva regulación sobre la absorción de perdida de los bonistas tanto en deuda senior como subordinada. En España, estaremos muy centrados sobre lo que va a pasar con la deuda subordinada de Bankia, ya que si las quitas son superiores a lo que el mercado estima veremos nuevas ampliaciones en el sector.