Tras las pérdidas sufridas en 2011 por valor de 2.000 millones de dólares, la minera canadiense comienza a levantarse. Para 2013 los expertos prevén un beneficio superior a los 1.100 millones.
Este año el oro podría brillar más que nunca. Al fin y al cabo, 2013 podría ser el decimotercer ejercicio consecutivo al alza del metal precioso -desde el año 2000 se ha revalorizado más de un 490%-. De hecho, según Goldman Sachs, la onza de oro podría superar los 1.800 dólares en el segundo semestre del año -ahora el precio ronda los 1.660 dólares-. Una más que suculenta oportunidad, aunque si es usted de los inversores que no se atreve a entrar directamente en este activo, tenga en cuenta que hay otras opciones a las que sacarle el máximo rendimiento: las empresas dedicadas al negocio del oro. Y en este sentido, una de las minas que merece la pena explotar es la de Kinross Gold.
La minera canadiense con proyectos en Canadá, Estados Unidos, Brasil, Chile, Ecuador, Rusia, Ghana y Mauritania forma parte del índice de bolsa mundial Eco30 -que recoge una treintena de valores internacionales elegidos según una decena de criterios fundamentales construidos por elEconomista y la firma especializada en consenso de mercado FactSet y que calcula Stoxx-. Esta compañía nacida en 1993 de la fusión entre Plexus Resources Corporation, Recursos CMP y 1021105 Ontario Corporation, está inmersa en un proceso de cambio desde el pasado agosto, cuando Paul Rollinson fue nombrado nuevo presidente ejecutivo. Rollison dejó claro entonces que la estrategia que había llevado hasta ahora la empresa iba a cambiar, centrándose principalmente en un plan de reducción de costes.
Un enfoque muy diferente al del antiguo presidente ejecutivo, Tye Burt, responsable de la adquisición en 2010 de Red Back Mining por 7.100 millones de dólares. Además, el 4 de abril de 2011, Kinross anunció que había aumentado su participación en la mina Kupol del 75% al 100%. Todo ello se tradujo en unas pérdidas de más de 2.000 millones de dólares en 2011.
Encuentra de nuevo el camino
No obstante, la compañía de exploración, desarrollo y producción de oro parece que ha vuelto a brillar como antaño. Si bien es cierto que la minera no ha entrado con demasiado buen pie en el nuevo año con una caída en el parqué superior al 15%, según el consenso de mercado, este ejercicio el beneficio de la canadiense superará los 1.100 millones de dólares, frente a los 838 estimados para 2012 -el próximo 13 de febrero se publicarán las cifras oficiales correspondientes al pasado año. Los analistas esperan un beneficio por acción de 0,22 dólares, el mismo que presentó la compañía en el tercer trimestre del año pasado-. Una tendencia positiva que continuará en 2014, cuando la media de firmas de inversión que siguen al valor espera que sus ganancias superen los 1.200 millones de dólares.
Una buena noticia si se tiene en cuenta que su PER -número de veces que el beneficio se recoge en el precio de la acción- irá disminuyendo paulatinamente, según los expertos. Así, su PER este año se sitúa en 8,1 veces, mientras que en el pasado ejercicio era de 11,1 veces. En 2014 su PER bajará hasta 7,6 veces -en 2010 este ratio llegó a situarse en 48,1 veces-.
Sin embargo, éste no es su único punto fuerte. Cuenta con una clara recomendación de compra por parte de los bancos de inversión, de hecho, un 65% de los expertos aconseja adquirir sus títulos. Además, es la compañía del índice de elEconomista que posee más potencial alcista, un 55,50%. Le siguen Goldcorp y Pacific Rubiales Energy para las que el consenso de mercado estima un carril alcista del 39,5% y 32,9%, respectivamente.