
En un contexto en el que se producen continuas subidas de impuestos, de los costes de la energía e incluso de la competencia en el mercado, mientras que el consumo sigue estancado, las empresas se ven obligadas a ofrecer precios atractivos y sacrificar beneficios para mantener su cuota de negocio. Una situación crítica que lleva a muchas compañías de la bolsa española a reducir sus márgenes al mínimo de la última década. En 2012, apenas 4,7 euros de cada 100 que facturan las cotizadas se convierten en beneficio; lejos se ven aquellos años en los que duplicaban o casi triplicaban su margen de beneficios.
Ecomargen, estudio elaborado por elEconomista que sigue el cálculo de la evolución de los márgenes de la bolsa española de los últimos 10 años (Ecomargen de beneficio), con los miembros que conformaban el listado en cada ejercicio y el dato actualizado del principal índice de la bolsa española, del Mercado Continuo (excluidas las compañías financieras), y las previsiones del consenso de mercado que recoge FactSet para 2012. La cifra que arroja no podría ilustrar mejor la situación que viven las empresas, con unos beneficios que siguen a la baja a pesar de que sus ventas sean mayores. Resultado: el rendimiento que obtendrán el conjunto de las cotizadas españolas de sus ingresos caerá este año al mínimo de la década.
La situación para las empresas no podría ser más complicada. Los datos del Banco de España correspondientes al tercer trimestre no dejan lugar a dudas: la economía española se contrajo un 0,4%, mientras que la demanda nacional se contrajo un 1,2% en este periodo, a pesar del efecto anticipación que generó la subida del IVA.
Con estas pinceladas, el panorama que les queda a las empresas es más que complicado y se ven obligadas a reducir su nivel de beneficios sobre ventas para mantener cuota de mercado, lo que lleva a los márgenes de las cotizadas españolas al mínimo nivel de los últimos diez años. En concreto, según las estimaciones del consenso de mercado que recoge FactSet, los márgenes de las compañías del Mercado Continuo se quedarán este año en el 4,67%, mientras que en 2011 cerraron en el 4,87%. Para realizar este cálculo se han excluido los resultados de la banca, debido a que el cálculo del margen ha tenido en cuenta exclusivamente la cifra de ventas puras y el beneficio.
Los márgenes de las firmas españolas en 2012 se podrían quedar reducidos a poco más de un tercio de los conseguidos durante la expansión económica de los años centrales de la década pasada. En el año 2005 esta cifra ascendió hasta el 11,57%. En aquel año únicamente seis compañías del Mercado Continuo cerraron con pérdidas; este ejercicio podrían ser hasta 20 (sin contabilizar al sector financiero).
Ventas históricas
Después de todo, las cifras de beneficio de las compañías podrían ser peores, mucho peores. En 2012 las ventas de las cotizadas españolas podrían volver a marcar un máximo histórico, según los cálculos de los analistas, al superar holgadamente el medio billón de euros. Esta cifra demuestra que los ingresos a precios corrientes de las empresas españolas se han mantenido por encima de los niveles precrisis, y que las empresas se han visto obligadas a correr con la cuenta de los costes e impuestos crecientes.
En comparación con el año 2005, las ventas del conjunto de empresas que componen el Mercado Continuo han crecido en casi un 50%. En aquel año, de plena expansión de la economía española, las ventas de las cotizadas español no alcanzaron los 0,4 billones de euros, cifra que se ha superado desde entonces cada año, pero que generó el mayor volumen de beneficios de las cotizadas españolas. Su expansión internacional les ha permitido escapar de la gran crisis del consumo que vive el país y elevar así su nivel de ventas, lo que pone de relieve que la salud de su negocio no se ha resentido gravemente durante la crisis. En suma, las ganancias conseguidas en 2005 superaron los 42.500 millones de euros, mientras que, siete años después, con unas ventas un 50% mayores, sus beneficios serán un 40% inferiores.
Otra vez, el ejemplo
Una vez más, Inditex se convierte en una referencia por su gestión de negocio. La textil ha logrado el reto de elevar, año a año, sus márgenes de beneficio hasta el punto de que podría cerrar este año con un resultado histórico. En el año 2003, la compañía convertía en ganancias 9,71 euros de cada 100 que facturaba, mientras que al cierre de 2012 esta cifra podría ascender hasta los 15,11 euros. Esto significa un avance de sus márgenes superior al 55% en 10 años y todo ello, en una crisis económica que afecta especialmente al consumo en los países desarrollados.
Entre las blue chips españolas, Abertis y Amadeus son las dos compañías que lucen mejores márgenes frente a su media en los últimos años. En el caso de la empresa de infraestructuras, el acuerdo por el que OHL se integra en su capital por la gestión de sus autopistas en Brasil ha supuesto el golpe de efecto. Desde que se conociesen los datos del acuerdo, los analistas han elevado las previsiones de márgenes de la compañía para 2012 en un 33% hasta el 26,9.