Rescate de Peugeot, despidos en Ford... la industria no gana para disgustos. Aún así, es uno de los sectores más rentables.
Ni a éste ni al otro lado del Atlántico las cosas están siendo fáciles para la industria automovilística. Valga el ejemplo del gigante Ford, que el miércoles confirmó que va a tener que cerrar la planta que tiene en Genk (Bélgica) a finales de 2014 y va a recortar alrededor de 4.300 puestos de trabajo. O el de Peugeot, que ha pedido ayuda al Gobierno de Francia, que a través del Banque PSA Finance ha puesto a disposición de la compañía 7.000 millones de euros para hacer frente a sus deudas, a cambio de un sitio en el Consejo. Sin embargo, mirando la evolución del sector en bolsa, estas noticias no han alcanzado para bajarlo del podium de rentabilidad, al menos en Europa. Así, si nos fijamos en las mejores industrias del índice Stoxx 600 en lo que llevamos de ejercicio, vemos que la automoción figura en segundo puesto, con un alza de casi el 20%, sólo superada por las aseguradoras. Eso sí, en el último mes ha sido uno de los que más terreno ha perdido en este sentido (alrededor de un 4,4%).
De hecho "si nos fijamos en su versión total return, el sector auto europeo está muy cerca de un soporte crítico, los 450 puntos (está en 473 actualmente). Si los pierde, marcaría un cambio de tendencia que podría llevarle a perder al menos un 10%, hasta los mínimos anuales", advierte Joan Cabrero, analista de Bolságora.
Sin embargo, tal como recalca este experto, ésta sigue siendo una industria fuerte, "y una de las que más potencial tiene en Europa" hoy por hoy. Así, es importante que surjan buenas noticias que le sirvan de revulsivo. Noticias que podrían llegar por el lado de los resultados corporativos.
El miércoles abrió la veda Volkswagen (VOW.XE) con sus cuentas. Y, de momento, las sensaciones son agridulces. Cierto es que, junto a la gala Renault (RNO.PA), son las dos únicas representantes del sector en nuestra cartera; presentó un beneficio por acción de 24,27 euros, por encima de los 22,36 que estimaba el consenso de mercado. Además, en conjunto su beneficio neto ha crecido casi un 60% frente al mismo período del año anterior. Pero la demanda de vehículos no atraviesa su mejor momento, y esto se nota en el beneficio operativo (ebitda) que entre enero y septiembre cayó casi un 2%.
Un calendario apretado
Ahora falta ver si las siguientes grandes automovilísticas cumplen y levantan la media. Empezando por la japonesa Honda, que se someterá al examen del mercado el próximo lunes 29, y siguiendo entre otras por las americanas Ford y General Motors, que esperarán al martes 30 y miércoles 31, respectivamente.
Desde luego, las estadounidenses son las que despiertan más suspicacias entre los expertos. Y es que desde que comenzó el año, las previsiones de beneficio para el conjunto de 2012 han caído un 5% en el caso de Ford y un 4 por ciento en el de General Motors. Y este recorte se ha producido sobre todo en los últimos meses.
Pero aún hay lugar para la esperanza. Y ésta puede llegar de lugares cercanos como Alemania, de la mano de BMW (BMW.XE), que ha visto crecer sus previsiones de ventas un 4% y las de beneficio neto alrededor de un 6,5%.