Segunda jornada consecutiva de apreciación para el euro contra el dólar en la que, lejos de sentir vértigo, la moneda única parece encontrarse cada vez más cómoda en sus máximos desde el mes de mayo.
Tanto es así, que la divisa común se anotó un alza del 0,3% que le permitió volver a comprar en el mercado 1,29 dólares. Es más, el euro está cada vez más cerca de darle la vuelta a la tortilla al pulso principal en el mercado de divisas entre la moneda europea contra la norteamericana. No en vano, desde sus mínimos anuales en los 1,2061 dólares que marcó el 24 de julio, el euro ya remonta más de un 7% contra el billete verde lo que permite acortar su depreciación contra el dólar, en lo que va de año, a sólo un 0,5%.
El 'tándem' Fed-Alemania
La combinación de dos factores fueron el principal revulsivo de la escalada de la moneda única. El primero, el debilitamiento del dólar ante la posibilidad de que la Reserva Federal anuncie una nueva ronda de estímulos monetarios en forma de QE3 y mantenga los niveles actuales de los tipos oficiales hasta 2015 (ver arriba). El segundo, el fortalecimiento del euro ante la tregua que está viviendo la crisis de deuda soberana de la eurozona.
Ayer, ésta escribió otro capítulo con la decisión del Tribunal Constitucional de Alemania, que dio luz verde al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) para iniciar el programa de compra de bonos. Eso sí, con la condición de que se requerirá aprobación parlamentaria en caso de que sea necesaria cualquier aportación del país germano a ese fondo que supere los 190.000 millones de euros.
Crudo y oro siguen otra senda
Las materias primas no bailaron tanto al son de la Fed como el euro y el dólar. Prueba de ello, es que pese al posible debilitamiento del billete verde, el oro y el petróleo no tiraron al alza. En el caso del crudo, pesó sobre todo el alza en los inventarios de este combustible del Departamento de Energía de EEUU en el barril Brent europeo y en el americano West Texas. El primero, repuntó sólo un 0,1% hasta los 115,5 dólares, mientras que el otro retrocedió un 0,2% y perdió la cota de los 97 dólares. Por su parte, el oro sufrió un descenso del 0,14% hasta los 1.730 dólares por onza.