Pese a que el ok del Tribunal Constitucional alemán al fondo europeo de estabilidad permanente (Mede) ya estaba siendo descontado por los inversores, la decisión del tribunal germano animó a los mercados y en todos se catapultaron cifras positivas.
Eso sí, la institución germana fijó unas condiciones. La primera de ellas es que Alemania tiene que fijar un límite a sus obligaciones cuando se apruebe en el Parlamento, y ese límite no puede superar los 190.000 millones de euros sin consentimiento de la Cámara; la segunda, es que las decisiones del Mede tendrán que ser presentadas a las dos cámaras del Parlamento, el Bundestag y el Bundesratdel, para su aprobación.
Sin embargo, estas restricciones no evitaron que los principales parqués concluyeran la sesión en positivo. Aunque el Ibex 35 rondó el nivel de los 8.000 puntos en la jornada de , al final el selectivo tuvo que conformarse con un alza del 0,78 % que lo dejó en los 7.992 puntos, siendo el segundo parqué más alcista de Europa. No obstante, en el intradía el principal indicador bursátil español llegó a marcar los 8.076 puntos, un nivel que no veía desde el pasado mes de abril.
"Los niveles actuales de Ibex se enfrentan a resistencias clave para estos días, dado que estamos muy cerca de la zona de 8.100 - 8.200 puntos, por donde pasa una de las primeras directrices bajistas que tiene el Ibex (directriz desde octubre del 2011). Dada la importancia del nivel y a pesar de que siguen llegando buenas noticias, el Ibex debería encontrar problemas para superar estos niveles de 8.200 puntos", asegura Luis Lorenzo, analista de Dif Broker.
El valor más destacado de la sesión fue Sacyr, que logró un alza superior al 8 %. Le siguieron, aunque más alejados, Mapfre y Gas Natural, que protagonizaron subidas del 3,8 y 2,9 % respectivamente.
El mercado de deuda español también sintió el alivo del visto bueno al Mede mientras que los intereses del bono alemán a diez años subieron hasta el 1,6 % desde el 1,5 % de la jornada anterior.
Por su parte, la prima de riesgo española descendió 14 puntos básicos (los mismos que la prima de riesgo a corto plazo -lo que mide el diferencial entre el bonoe español y el alemán a dos años- que terminó en los 278 puntos), cerrando en los 401 puntos con la rentabilidad del bono a una década en el 5,6 %. Aunque el diferencial se situó, a lo largo de la sesión, por debajo de los 400 puntos volviendo a niveles de abril, no pudo al final conseguir el objetivo.
Aún así, el riesgo país continuó un día más con la tendencia bajista que inició la semana pasada después del mensaje del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi propició que el diferencial perdiera 141 puntos.
Europa 'en verde'
En el Viejo Continente también se impusieron los alcistas. Salvo el Ftse 100 británico que cedió un 0,17 %, los principales parqués europeos se subieron al carro de las cifras positivas. El italiano Ftse Mib fue el índice que mayor subida experimentó con un alza del 1,19 %, seguido del Dax y el EuroStoxx 50 que escalaron un 0,46 y 0,28 %, respectivamente. El Cac 40 francés fue el más rezagado con un alza del 0,18 %.