La caída estival de los volúmenes de negociación, unido a que en el mercado se descuenta como una certeza que se va a acometer el rescate de España e Italia, se ha dejado notar y mucho en los índices de volatilidad.
De hecho, en los últimos 30 días tanto el norteamericano VIX como el europeo VDAX han experimentado sendas correcciones del 14,4 y el 14,7% en cada caso. Lo que ha llevado al primero incluso a sus niveles más bajos desde el mes de abril, en los 15,3 puntos. Unas correcciones en principio bienvenidas, ya que estos indicadores suelen reflejar el pesimismo y el miedo imperante en los mercados, con lo que tienden a evolucionar en sentido contrario al de los índices bursátiles, cayendo cuando estos suben y viceversa.
¿Exceso de confianza?
Sin embargo, estos niveles tan bajos levantan suspicacias en algunos expertos. "Una recuperación sostenida del mercado no empieza con un VIX en 15", señala John Kosar director de análisis de Ashbury Research. "Una lectura por debajo de 30 señala un nivel relativamente bajo de miedo en los mercados. Esto indica que nadie está nervioso y "entonces es cuando ocurren las cosas malas", añade.
