Nueve meses después de la última vez, Portugal ha vuelto a ver hoy cómo los intereses que penalizan su deuda soberana a diez años caían por debajo del 11%, confirmando la tendencia observada en las últimas semanas.
Los mercados reaccionaron hoy de forma positiva a la ayuda financiera concedida por la Unión Europea a España para la recapitalización de su sistema bancario, anunciada el pasado sábado, lo que se ha reflejado en subidas generalizadas en las bolsas y menor presión de los inversores sobre la deuda soberana.
En este contexto, los títulos portugueses a diez años, el plazo utilizado habitualmente como referencia, se situaban en el 10,98%, una décima menos que la tasa a la que cerraron el viernes en el mercado secundario -donde se compran y venden las obligaciones adquiridas en subasta pública-.