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París, 6 jul (EFECOM).- La competencia que se libran los gobiernos con el impuesto de sociedades amenaza seriamente el futuro de los países dada la "amplitud inquietante" de la evasión fiscal y de las crecientes ventajas fiscales de que gozan las empresas, según la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL).
Los gobiernos deben colaborar entre sí y con la OCDE para cubrir las grietas que permiten a las empresas eludir el impuesto de sociedades con filiales en paraísos fiscales, que cada año reciben seis veces más dinero del necesario para financiar la enseñanza primaria en todo el mundo, señala la CIOSL en un informe publicado hoy en París.
"En un momento en que el comercio absorbe una parte más importante que nunca de los aumentos de productividad, en que las empresas tienen más beneficios que nunca, en que la protección social de los empleadores se reduce, ¿No sería justo que las empresas pongan algo en la bolsa del gasto público?", se pregunta el secretario general de la organización, Guy Ryder.
"Después de todo, es gracias a las inversiones gubernamentales en infraestructuras y en educación por las que las empresas han podido seguir siendo competitivas", añade Ryder, que advierte de que la situación no puede durar.
Citando el caso de grandes compañías como Boeing, Hallyburton, Morgan Stanley, Pepsi, Citigroup y Xerox, la confederación sindical denuncia que se benefician de los paraísos fiscales para evitar pagar impuestos por una parte de sus beneficios, pese a que éstos también se hacen gracias al dinero del contribuyente por medio de contratos de las administraciones.
Explica que la competencia fiscal entre Estados ha llevado a reducir el tipo medio del impuesto de sociedades en los países industrializados del 45 al 30% en veinte años, y que respecto a la imposición total, desde los años 80 el impuesto de sociedades ha disminuido un 15% en el Reino Unido o un 22% en Italia.
En Estados Unidos, de las 275 mayores compañías, 82 no pagaron impuestos o se beneficiaron de un reembolso fiscal al menos en un año entre 2001 y 2003, siempre de acuerdo con la CIOSL.
Para 2001, la organización calcula que ese país perdió 53.100 millones de dólares de ingresos fiscales sólo por el "abuso" en el establecimiento de precios de cesión interna.
Y critica que el número de zonas francas industriales (que ofrecen exenciones fiscales) haya aumentado de 850 en 1998 a más de 5.000 en 2004, "pese a los antecedentes generalmente malos en el derecho del trabajo".
La CIOSL asegura que las reducciones de impuestos que conceden los gobiernos no se traducen en más inversiones en los países que las conceden, sino que "las empresas que se han beneficiado de esa 'generosidad' devuelven el favor disminuyendo sus inversiones y deslocalizando".
La confederación sindical se reúne con responsables de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para pedir que pongan en marcha dispositivos de control que eviten la evasión fiscal e impidan que la dinámica actual de carrera para dar ventajas fiscales a las empresas ponga en peligro las finanzas públicas. EFECOM
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