Bolsa, mercados y cotizaciones

El BCE (aún) no contempla rebajar los tipos pese a la amenaza de la recesión

Más que una realidad, era un deseo. ¿Anticipará el Banco Central Europeo (BCE) una rebaja de los tipos de interés en junio? La pregunta latía en el ambiente. Pero su presidente, Mario Draghi, la disipó pronto. "No hemos discutido un recorte de los intereses", afirmó en la rueda de prensa posterior a la reunión. Ni siquiera la sombra de la recesión, cada vez más alargada sobre la eurozona, alteró el pulso del BCE, que ayer mantuvo el precio del dinero en el 1 por ciento en el que se encuentra desde diciembre y que, por mediación de esas palabras de su presidente, telegrafió que por ahora no baraja reducir los tipos.

Draghi defendió que no hay motivos para hacerlo. Primero, porque a su juicio la actual política monetaria sigue siendo expansiva, es decir, que apoya el crecimiento. Segundo, porque entiende que "la actividad económica se recupere gradualmente durante el año", pese a que "las perspectivas económicas siguen sujetas a riesgos a la baja". O lo que es lo mismo, minimiza la amenaza de la recesión. Y tercero, porque "es probable que la inflación se mantenga por encima del 2 por ciento en 2012". Mientras sea así, y como quiere que su objetivo es mantener los precios por debajo, pero cerca, del 2 por ciento, no parece factible que reduzca los tipos. Eso sí, al menos el BCE ya no se siente tan preocupado por la inflación, puesto que ahora ve que los riesgos sobre los precios están "equilibrados", cuando en abril consideraba que eran "al alza".

Es "prematuro"

Aunque enfrió las expectativas sobre una rebaja inminente de los tipos, Draghi intentó transmitir cierta connivencia con los mercados y los agentes económicos. Así, admitió que "es prematuro" hablar de una retirada de los estímulos. De algún modo, fue su gesto de generosidad. "Su particular guiño a los mercados se limitó a considerar prematura una estrategia de salida de las actuales medidas monetarias", constata Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG Markets.

Para reforzar esa impresión, Draghi complementó ese mensaje con otros. Así, reiteró que el programa de compras de deuda pública (SMP) "aún sigue ahí", con lo que dio a entender que podría ser empleado en cualquier momento, aunque admitió que "no puede ser enterno e infinito". Los hechos confirman esta aclaración, puesto que el BCE lleva siete semanas consecutivas sin adquirir bonos en el mercado pese a las presiones que están sufriendo España, principalmente, e Italia.

Al mismo tiempo, anticipó que en junio anunciará qué hace con la barra libre, es decir, la estrategia mediante la que presta a los bancos tanto dinero como le piden en las operaciones de financiación. En opinión de los expertos de Barclays Capital, "es muy posible que extienda la barra libre en todas las operaciones regulares del BCE, probablemente hasta al menos mediados de enero". Por el momento, eso sí, Draghi no soltó prenda acerca de la posibilidad de convocar un nuevo préstamo a tres años para las entidades financieras.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky