TOKIO (Reuters) - Las acciones de Asia cayeron el lunes debido que a una fuerte desaceleración en el crecimiento del empleo en Estados Unidos planteó dudas sobre la fortaleza de la mayor economía mundial, llevando a los inversores a reducir su exposición al riesgo antes de nuevos datos estadounidenses y chinos esta semana.
Las cifras del viernes mostraron que las nóminas de pago de Estados Unidos crecieron en 120.000 en marzo, muy por debajo de las 203.000 que esperaba el mercado y su menor avance desde octubre, lo que mantuvo la puerta abierta a que la Reserva Federal entregue más respaldo monetario a la frágil economía.
Las materias primas industriales como el cobre y el petróleo cayeron debido a preocupaciones sobre el crecimiento, mientras que la posible inyección de capital de la Fed ayudó al oro a recuperarse, pero presionó al dólar.
El referencial MSCI de acciones asiáticas no japonesas cayó hasta un 0,8 por ciento cerca de un mínimo de cuatro semanas que tocó la semana pasada.
En Japón, el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio cerró con una baja de un 1,5 por ciento, después de caer un 1,6 por ciento a un mínimo de un mes, con un yen más fuerte que también pesó sobre el sentimiento del mercado.
Algunos mercados asiáticos, incluidos Australia y Hong Kong, así como las plazas europeas, permanecían cerrados el lunes.
La tasa de inflación anual de China alcanzó un 3,6 por ciento en marzo, con los precios de los alimentos liderando un rebote temporal que empujó a los costes por encima de las expectativas, pero dejó intacta la perspectiva de que Pekín tiene la flexibilidad de relajar su política monetaria para fomentar el crecimiento.
Entre los datos que debe entregar esta semana China, la segunda mayor economía mundial después de Estados Unidos, también están los de comercio el martes y el producto interno bruto del primer trimestre el viernes.
La economía de China posiblemente creció a su menor ritmo en casi tres años entre enero y marzo, a solo un 8,3 por ciento; sin embargo, este avance estaría muy por sobre la meta del Gobierno para el año de un 7,5 por ciento y apuntaría a una suave desaceleración.
El cobre en Shanghai caía un 0,9 por ciento antes de recortar sus pérdidas por las esperanzas de que China, el mayor consumidor mundial del metal rojo, continuará con una política monetaria flexible.
El petróleo se vía presionado por preocupaciones sobre la demanda, así como por menores temores de una interrupción a los suministros.
El crudo Brent caía 1,26 dólares a 122,17 dólares por barril respecto al cierre del jueves, después de que Irán accediera a reanudar las negociaciones con las potencias mundiales sobre su programa nuclear, aumentando las esperanzas de una solución pacífica a una disputa que ha afectado a los mercados durante meses.
El crudo de Estados Unidos perdía 1,44 dólares respecto al cierre del jueves a 101,87 dólares por barril. Los mercados del petróleo estuvieron cerrados el viernes por la celebración del Viernes Santo.
El oro al contado subía un 0,9 por ciento a 1.643 dólares la onza.
El dólar extendía sus pérdidas contra el yen el lunes y alcanzó un mínimo de un mes de 81,18 yenes, pero subía un 0,2 por ciento frente al euro a 1,3067 dólares.