Los inversores aún no confían en traer su dinero a la bolsa española. La baja negociación sigue siendo la tónica dominante en el mercado. Esta semana se conocieron los datos oficiales de contratación en el primer trimestre del año, en el que el volumen negociado en renta variable cayó hasta los 176.935 millones de euros, un 28 por ciento inferior al registrado en el mismo periodo de 2011.
Estas cifras no ponen en peligro, sin embargo, la retribución que entregará a sus accionistas la gestora del parqué español, Bolsas y Mercados Españoles, que se incorpora al EcoDividendo.
Por el momento, no habrá recortes ni cambios en la política de dividendos, como sí están acometiendo otras compañías. Pese a que el año pasado la contratación finalmente quedó por debajo del billón de euros, BME mantendrá intacto el importe de su remuneración. Después de haber repartido ya un euro por acción entre sus accionistas -en dos entregas de 0,4 y 0,6 euros en los meses de septiembre y diciembre-, la compañía abonará otros 0,6 euros más a cargo de los resultados de 2011, junto a un dividendo extraordinario de 0,372 euros, idéntico al que pagó hace un año. Está previsto que los pagos se efectúen durante la primera semana de mayo. Sólo falta el visto bueno de la Junta General de Accionistas.

El bajo volumen pasa factura
La escasa negociación bursátil, que sigue sin repuntar a pesar del levantamiento de la prohibición de operar en corto en valores financieros, sí está pasando factura a la cotización del valor. BME retrocede alrededor de un 11 por ciento en lo que va de año, con lo que esta semana sus títulos cerraron en zona de mínimos del mes de septiembre. A estos niveles, la suma de los dos dividendos -0,972 euros por acción- suponen una rentabilidad de más del 5 por ciento. "A corto plazo el pago de dividendos supondrá un soporte de la cotización, pero a medio y largo plazo la evolución de los volúmenes seguirá siendo negativa, y el riesgo de robo de cuota por parte de la competencia sigue siendo el principal riesgo en el valor", consideran los analistas de Sabadell.