El Dow Jones Transportes pone pegas a los alcistas, o falla por la economía o necesita una caída de precio del crudo.
Estamos en medio de una pugna interesante en la renta variable. Interesante porque estamos pendientes de ver si aguanta la bolsa americana o no. Si se mantiene en pie, es probable que veamos antes o después un rebote en la europea. Si corrige, los números rojos podrían profundizar en el parqué del Viejo Continente.
La barrera que no debe caer en Wall Street son los 1.386 puntos del S&P 500, como le hemos estado contando en los últimos días en Ecotrader; pero tampoco descartamos sorpresas positivas... y el Dow Jones Transportes puede ser protagonista de ellas: de ahí que hayamos lanzado en los últimos días una estrategia alcista sobre el indicador.
Hasta ahora este índice ha sido el más díscolo de todos los que integran Wall Street. Díscolo en la medida en que en las últimas semanas es el que no ha querido aliarse con los inversores alcistas porque es el único que no "ha conseguido superar los máximos de febrero", según señala Joan Cabrero, analista técnico de Ágora Asesores para Ecotrader; que es la zona que se encuentra a la altura de los 5.400 puntos.
Y esta situación de quedarse atrás puede achacarse a varias razones: por un lado, o sufre por la subida del precio del petróleo o, por el otro, le pesan las dudas sobre la economía global. La pérdida de los 5.000 puntos, por el contrario, nos alertaría ante nuevas caídas.
¿Algo más que el carburante?
"Tradicionalmente el Dow Jones Transportes es uno de los índices más cíclicos de Wall Street", señala Alain Galibert, estratega de Ecotrader. Como muestra la composición del índice, en el que básicamente cotizan empresas de mensajería, como pueden ser Fedex o United Parcel, aerolíneas, como Delta Airlines, y empresas de ferrocarriles tales como Union Pacific. En total, son 20 valores, muy relacionados, por cierto, con el coste del combustible.
El problema es que no podemos tener claro si en la falta del último empujón del Transportes es culpa del petróleo o lo es de que las expectativas de crecimiento global se están enfriando tanto por la zona euro como por los últimos datos macroeconómicos que se han conocido en la economía China.
Lo único que se ve por fundamentales es que los bancos de inversión no son ni mucho menos negativos con los valores de mayor capitalización que forman parte de este índice, ni en recomendación ni tampoco en revisiones de beneficio por acción. En el primer caso, predominan los consejos de compra, en tanto que en el segundo caso los tijeretazos a las estimaciones se limitan a las empresas de líneas aéreas.
Por ejemplo, en el caso del grupo Continental, la previsión de beneficio por acción para este año se ha contraido un 19% y más de un 10% para el siguiente ejercicio. Un efecto que también se nota en las aerolíneas de menor tamaño.