Los mercados necesitan un descenso y, por ello, tal vez sea el momento de reducir posiciones en renta variable.
Es curioso explicar el comportamiento de los mercados, ya que éstos suben porque se está solucionando el problema de Grecia (junto a la inexplicable subida del euro frente al dólar, que parece motivada en principio por las fuertes compras de la divisa europea que han llevado a cabo los inversores asiáticos).
Sin embargo, estos problemas no se están solventando definitivamente, sino que se trasladan un día tras otro, y así llevamos ya dos semanas. Esto nos alerta sobre un futuro escenario: si finalmente se acaba solucionando el problema heleno, ya está descontado en el mercado. Si por el contrario no se consigue resolver el entramado, es posible que vengan caídas, por lo que hay que andar con especial cautela.
¿De qué nos avisa el mercado?
La tendencia alcista del Nasdaq 100 norteamericano se mantiene intacta, apoyada en una enorme sobrecompra de los títulos de Apple, que se encuentran cerca de los 500 dólares, mientras que los otros dos índices del país están en estos momentos dando algunas muestras de agotamiento. Hacemos referencia al Dow Jones Industrial y al S&P500.
Pero lo que nos está empezando a avisar de un posible techo del mercado es el comportamiento del Dow Jones Transportation, un índice mucho menos seguido que el anterior, pero con la misma historia y bastante más ligado a las compañías de transporte que al sector industrial.
Aprovechar este escenario
Nuestro escenario actual no es bajista ni mucho menos, pero sí creemos que los mercados necesitan un descanso y, por ello, tal vez sea el momento de empezar a reducir posiciones en renta variable.
Planteamos la posibilidad de invertir en fondos cotizados o ETFS conocidos como inversos, es decir, que apuestan a la baja del mercado. Así, siguiendo la estela de los tres principales índices americanos tenemos en primer lugar al Short Dow Jones 30 ETF (DOG), en segundo lugar el Short S&P500 ETF (SH) y en tercer lugar el Short QQQ ETF (PSQ), que es nuestra apuesta por varios motivos: la sobrecompra acumulada y el peso excesivo de Apple, que si bien está en máximo histórico, cualquier noticia negativa del valor afectaría de forma muy agresiva al mencionado índice.
Finalmente, el S&P 500 ha roto la resistencia de los 1.330 puntos, pero da sensación de agotamiento y a no ser que tengamos buenas noticias de Grecia (con la temporada de resultados en EEUU casi acabada no esperamos grandes novedades) creemos que es más posible verlo en niveles cercanos a los 1.300 puntos.