
Sevilla, 31 ene (EFE).- Más de 21,7 millones de turistas visitaron Andalucía durante 2011, lo que supone un incremento del 2,3 por ciento respecto al año anterior, y de ellos más de 3,9 millones de ellos lo hicieron en el último trimestre del pasado año.
Según la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía del cuarto trimestre de 2011, el número de turistas que llegaron a la comunidad autónoma en los últimos tres meses supone un 0,7 por ciento más que en el mismo periodo de 2010.
En este periodo, el 32,6 por ciento eran andaluces, el 28,5 por ciento del resto de España, el 25,6 por ciento procedían de la Unión Europea (UE) y el 12,3 por ciento restante llegaron de otros países.
La gran mayoría, el 85,7 por ciento, lo hizo por vacaciones, mientras que el resto visitó a familiares y amigos o alegó otras motivaciones.
El 75,1 por ciento de los viajeros se alojó en establecimientos hoteleros, mientras que el resto utilizó apartamentos, pisos o chalets, con una estancia media de 8,5 días.
Por provincias, Málaga concentró el 30,7 por ciento de los turistas, seguida de Granada, con el 17,2 por ciento, Sevilla con el 16,5 por ciento, y Cádiz, con el 12,9 por ciento, según este estudio, elaborado por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía.
El gasto medio que realizaron los turistas se estima en 61,63 euros, un 3,2 por ciento más que en el mismo trimestre del año anterior, aunque oscila entre los 54,72 euros que gastaron los andaluces y los 75,39 euros de los procedentes del resto del mundo.
Los turistas que visitaron Andalucía concedieron un 7,7 sobre 10 en la valoración del viaje realizado, siendo la nota más alta el 8 de Almería, con aspectos destacados como la atención y el trato, los paisajes, los parques naturales y el patrimonio cultural.
Además, el 35,4 por ciento consideró que la red de comunicaciones era mejor de lo esperado, el 35,4 por ciento optó por el medio ambiente y el 30,5 por ciento por los monumentos, mientras que más de un 10 por ciento de los viajeros manifestaron que los precios eran peores de lo que preveían.