La compañía destina 400 millones de euros anuales a iniciativas relacionadas con el medio ambiente
MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
La empresa química BASF se ha fijado como objetivo reducir en un 25% las emisiones de CO2 a la atmósfera por cada tonelada de sus productos en el año 2020, según se desprende de un estudio publicado recientemente por la compañía.
En el documento --el primer balance de CO2 elaborado a nivel mundial por una empresa--, uno de los miembros de la Junta Directiva de BASF, Harald Schwager, reconoce que se trata de una meta "muy ambiciosa pero importante", puesto que la eficiencia energética "interrelaciona protección del clima, conservación de los recursos y ventajas competitivas".
El estudio muestra sólo las emisiones derivadas de la producción de BASF, sino que contempla las emisiones que se producen en la obtención de materias primas y productos intermedios, así como en la eliminación de todos sus productos.
Además, BASF ha investigado el ciclo de vida de 90 de sus productos más representativos para disminuir el impacto de sus emisiones en su utilización en productos finales.
La compañía destina cerca de 400 millones de euros anuales --más de un tercio de sus gastos totales en Investigación-- a eficiencia energética, protección del clima, conservación de los recursos y materias primas renovables.
El vicepresidente de la Junta Directiva de BASF, Eggert Voscherau, ha reconocido que "el cambio climático es uno de los principales retos sociales". "Nosotros afrontamos este reto, ofreciendo múltiples soluciones que contribuyen a la protección del clima", añadió.
REPRESENTANTE PARA EL CAMBIO CLIMATICO.
Voscherau adelantó que, próximamente, la compañía nombrará un Representante para el Cambio Climático ya que la protección del medio ambiente "forma parte indisoluble de la estrategia de sostenibilidad de BASF y constituye una tarea estratégica a largo plazo cada vez más intensa".
Este representante formará parte del Consejo de Sostenibilidad de BASF y coordinará, a nivel mundial, todas las actividades de la empresa en este campo como las emisiones de gases efecto invernadero en la producción o en la eliminación de residuos, entre otras.
Voscherau también hizo un llamamiento a las instituciones europeas para que desarrollen una política energética y climática "eficaz", que tenga en cuenta "la fuerza innovadora y competitividad de la industria europea". "¿De dónde deben venir las soluciones sino de la industria?", concluyó.