
La Bolsa de Tokio ganó hoy un 0,67% y cerró en 8.455,35 puntos, su nivel más bajo registrado en una última sesión del año desde 1982, en un 2011 marcado por el terremoto de marzo, la fortaleza del yen y las inundaciones en Tailandia. El principal indicador de las bolsas chinas, por su parte, cayó durante 2011 cerca de un 21%.
El selectivo Nikkei cerró con una subida de 56,46 puntos, el 0,67%, y quedó en 8.455,35 unidades, mientras que el índice Topix, que agrupa a todos los valores de la primera sección, subió 6,49 puntos, el 0,90%, hasta 728,61 enteros. El Nikkei ha cerrado el año con una caída del 17,34%.
Los analistas consideran que el Nikkei, condicionado este año por el terremoto del 11 de marzo, la situación económica en Europa y Estados Unidos y las inundaciones en Tailandia, oscilará en torno a los 8.000 enteros hasta primavera, que es cuando prevén que disminuirán los temores que provoca la crisis de deuda en la zona del euro. A partir de ese momento consideran que el selectivo nipón podría escalar hasta un nivel máximo de unos 11.500 puntos hacia el final de 2012.
"El mercado tokiota se vio afectado por sucesos imposibles de predecir en 2011, sin embargo esta tendencia es poco probable que continúe en 2012", explicó Fumiyuki Nakanishi, analista de SMBC Friend Securities, a la agencia local Kyodo.
Mercado chino
La Bolsa de Shanghái cerró hoy, en su último día de cotización del año, con ganancias de un 1,19%, ante la expectativa de los inversores de que Pekín inyecte capital en el mercado en 2012 para seguir estimulando el crecimiento económico nacional.
El índice general de Shanghái (acciones convertibles y no convertibles) concluyó su cotización diaria en 2.199,42 puntos, 25,86 puntos por encima del cierre de ayer.
Con su relativa recuperación de los últimos tres días, después de ocho semanas consecutivas de descensos, hasta que el pasado martes alcanzó su cotización más baja en casi tres años, con 2.166,21 puntos, el parqué shanghainés cierra el año a las puertas de los 2.200 puntos.
El principal indicador de las bolsas chinas cayó durante 2011 cerca de un 21 por ciento, y desde mayo pasado no ha conseguido remontar por encima de la línea psicológica de los 3.000 puntos.