El mercado asume que el BCE bajará los intereses al 1% e incluso no descarta un recorte al 0,75%......y da por hecho que la institución fortalecerá los mecanismos de financiación para los bancos
Mario Draghi sólo lleva un mes al frente del Banco Central Europeo (BCE). ¡Pero vaya mes! En su primera reunión como presidente de la entidad rebajó los tipos de interés del 1,5 al 1,25 por ciento; luego, ha contemplado cómo el virus de la crisis de la deuda soberana se ha contagiado definitivamente a Italia y España; ha recibido presiones cada vez más fuertes para que incremente las compras de deuda periférica; ha asistido a varias cumbres o reuniones para abordar el futuro del euro; ha reforzado con la Reserva Federal (Fed) de EEUU y otros cuatro de los principales bancos centrales del mundo su alianza para intercambiar divisas y reforzar la liquidez de los bancos; y ha escuchado cómo, de forma abierta, se habla de forma seria del riesgo de ruptura de la moneda única.
El broche a esta estresada agenda se producirá esta semana. En concreto, el jueves, jornada en la que comandará su segunda reunión del Consejo de Gobierno del BCE. A diferencia de la primera, en la que la rebaja de los intereses sorprendió, esta vez sí se espera que abarate el precio del dinero.
El 90 por ciento de los 48 expertos consultados por la agencia financiera Bloomberg se inclina por otro recorte de un cuarto de punto, hasta el 1 por ciento... aunque no son pocos los expertos a los que les gustaría una velocidad mayor. "Nosotros damos por hecho que habrá un recorte de los tipos de interés. Me gustaría que fuera de medio punto, aunque lo espero de un cuarto", vaticina José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España.
Por la banca...
Pero dado lo lejos que ha llegado la crisis soberana, esta vez no valdrá con bajar los tipos. El mercado espera más. Sobre todo, por los crecientes problemas que están afrontando los bancos para financiarse. Para paliar estas restricciones, todo indica que el BCE introducirá modificaciones en su estrategia para dar cabida a operaciones de financiación a muy largo plazo. Si hasta la fecha nunca había prestado dinero a los bancos por un periodo superior a 13 meses, no se descarta que convoque operaciones a dos o tres años para afianzar la liquidez disponible para las entidades bancarias.
"Es muy posible que alargue los plazos de financiación y no sería descartable alguna sorpresa en otros apartados, como los criterios o los descuentos que aplica en los colaterales que pide en sus operaciones", indica José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney. "Sería deseable la cuantificación al alza de la compra de activos mediante el programa de adquisición de bonos (SMP). También nos gustaría un mensaje contundente sobre la crisis de deuda, porque en el fondo es un factor de tensión en los mercados y éste es un objetivo del BCE", agrega Martínez Campuzano.
...y por el euro
Pero las decisiones no sólo dependerán de los problemas financieros. También se verán influenciadas por el debilitamiento de la economía europea. En este sentido, el mercado prestará una atención especial a las previsiones que comunique la entidad. En septiembre, situó el crecimiento para 2012 entre el 0,4 y el 2,2 por ciento y la inflación, entre el 1,2 y el 2,2 por ciento. Todo indica que revisará fuertemente a la baja estos pronósticos, con lo que daría por hecho que las medidas expansivas continuarían en los próximos meses.
Más reuniones
Junto a la reunión del BCE, la actividad será intensa esta semana en el universo de los bancos centrales. El martes, Canadá podría mantener los tipos en el 1 por ciento y Australia rebajarlos del 4,5 al 4,25 por ciento, y el jueves Inglaterra dejará los intereses en el 0,5 por ciento, pero podría introducir más dinero en la economía.