MADRID (Reuters) - Las acciones de Sacyr lideraban el descenso del Ibex-35 en las primeras operaciones al temer los inversores nuevas complicaciones por su situación financiera que, según analistas, se ha visto agravada por el sostenido descenso en bolsa de su participada Repsol.
"Tras las caídas de Repsol, ayer la cotización se situó por debajo del precio mínimo a partir del que saltan las garantías (del crédito suscrito para financiar la compra)", advirtió Banesto.
Pero los analistas están menos preocupados por las eventuales minusvalías y más por las garantías que tendría que aportar Sacyr para hacer frente al crédito sindicado suscrito.
Según las condiciones del contrato, el mencionado precio sería más alto en función de las amortizaciones de crédito que la constructora fuese realizando. Además, los dividendos que cobra la constructora por su participación en la energética pagan sobradamente los costes de la financiación. Con cargo a 2007, Repsol ha anunciado un incremento del 40 por ciento en su dividendo.
"Nuestra valoración es negativa debido a la actual presión del mercado y al aumento del riesgo financiero de la compañía", resumió Banesto.
