
Por segunda vez esta semana, el Tesoro Público ha acudido al mercado en busca de liquidez. Y, de nuevo, tras una rebaja de rating a la deuda española, esta vez por parte de Moody's. Según los datos facilitados por el Banco de España, el importe obtenido con la operación de hoy asciende a 3.910 millones de euros.
La cifra está lejos del máximo que preveía captar el organismo dirigido por Soledad Núñez, que se elevaba a 4.250 millones de euros, mientras que el mínimo eran 3.250 millones.
El Tesoro ha efectuado subastas de títulos con tres vencimientos distintos. Así, ha vendido obligaciones a 31 de enero de 2017 por un valor de 1.082 millones de euros y a un interés del 4,782%.
Además, ha adjudicado otros 1.035 millones de euros en bonos con vencimiento a 2019. El rendimiento exigido ha sido del 5,110%, superior al 4,969% ofrecido en la anterior emisión, realizada el pasado mes de septiembre. En cuanto a la demanda, ha caído ligeramente con respecto al mes anterior, hasta las 2,1 veces.
Por último, ha colocado 1.787 millones de euros en bonos a diez años. En este caso, el interés se ha situado en el 5,435%, por debajo del 5,896% de la subasta del mes anterior e incluso del interés registrado en el mercado secundario justo antes de la subasta, que era del 5,470% según los datos de Blooomerg. El ratio de cobertura se ha situado en 1,8 veces.
Oleada de rebajas
El Tesoro ha vuelto hoy a calibrar la confianza de los mercados después de que la agencia de calificación Moody's haya degradado la 'nota' de España por la vulnerabilidad del país y la falta de una solución creíble a la crisis de deuda.
Se trata de la tercera rebaja que sufre España en apenas dos semanas, después de que tanto Fitch como Standard & Poor's revisaran a la baja sus calificaciones por el riesgo que supone la consolidación fiscal y el débil crecimiento económico.
La próxima cita ante los inversores será el 25 de octubre, cuando emitirá letras a tres y seis meses.