
Según la prensa belga, los dos grupos españoles estarían entre los interesados por hacerse con el negocio de buena calidad en Bélgica. Una compra encajaría perfectamente en la estrategia del Santander, que busca aumentar su presencia en Europa.
El Santander y BBVA aparecen en la lista de candidatos para hacerse con una parte de Dexia. Según la prensa belga, los dos grupos españoles estarían entre los interesados por hacerse con el negocio de buena calidad en Bélgica, una vez se nacionalice y se desguace gigante europeo con la creación de un banco malo bajo garantía estatal. Además, en la lista se incluye a HSBC y Deutsche Bank.
Una compra encajaría perfectamente en la estrategia del Santander, que busca aumentar su presencia en Europa. Le permitiría entrar en un mercado nuevo y avanzar en su expansión por el Viejo Continente. Fuentes de ambas entidades no quisieron hacer comentarios al respecto.
Lo cierto es que ayer se volvió a vivir una nueva jornada frenética en las negociaciones para desmantelar el banco franco-belga con los gobiernos de los países afectados intentando amortiguar la caída de la entidad y, en el caso de París y Bruselas, minimizar el impacto de este nuevo rescate sobre la nota de sus deudas soberanas. El operador bursátil Euronext suspendió la cotización de sus títulos después de que se desplomaran más de un 17%.
El consejo de administración de la entidad, determinado a vender rapidamente sus filiales mejor valoradas, confirmó ayer que ha entrado en negociaciones con un grupo de inversores internacionales y con el Gran Ducado de Luxemburgo para vender Dexia Bank Internacional, su filial en ese país. La prensa asegura que el fondo soberano de Qatar forma parte de estas negociaciones.
El propio ministro de Finanzas de Luxemburgo, Luc Frieden, confirmó que las gestiones avanzan con rapidez y que deberían estar cerradas para finales de este mes. En declaraciones hechas durante una rueda de prensa, Frieden explicó que Luxemburgo figurará como un accionista minoritario dado el carácter sistémico de Dexia que es el mayor proveedor de servicios bancarios dentro del Gran Ducado.
Nacionalización
Las gestiones son más sensibles en el caso de Bélgica. La prensa de este país aseguraba ayer al término de un consejo de ministros restringido que Bruselas se inclina a favor de una nacionalización de Dexia Bélgica. Una versión que de momento no ha sido confirmada por el ejecutivo belga. En una rueda de prensa posterior, el ministro de Finanzas, Didier Reynders aseguró que todas las opciones están siendo estudiadas. "Por parte belga, nosotros deseamos claramente reforzar nuestra posición en Dexia Bélgica", dijo Reynders.
Los rumores de nacionalización no cayeron nada bien entre la dirección de Dexia. El banco se apresuró a negar esta versión a través de un comunicado. "Dexia desea enfatizar que no ha sido informada de ninguna decisión o borrador de decisión con relación a las opciones futuras del grupo", dice la nota en la que además precisa que el consejo de administración del banco se reunirá el sábado para estudiar las diferentes opciones relativas al futuro de Dexia.
No fue el único cruce del día. Las autoridades belgas también lanzaron un mensaje a París de que esperan un reparto justo del peso del nuevo rescate al banco.
De momento, el Gobierno galo no ha respondido, enfrascado en arduas negociaciones para conseguir que la Caja de Depositos francesa (CDC) y la Banque Postal retomen las actividades de prestamista local de Dexia en Francia. El ministro de Finanzas francés, François Baroin, había asegurado que un acuerdo estaría listo para ayer jueves pero finalmente no hubo ningún anuncio.