El Tesoro tenía su primera cita con los mercados finacieros después de que se paralizara la salida a bolsa del 30 por ciento de la empresa pública Selae (Sociedad Española de Loterias y Apuestas del Estado).Y la ha pasado con mota: ha colocado el máximo previsto y a un menor tipo de interés.
El objetivo del organismo dirigido por Soledad Núñez, era captar entre un mínimo 3.500 y un máximo de 4.500 millones de euros en bonos a tres años. Y ha conseguido el máximo previsto.
Así, ha colocado 4.500 millones de euros con una rentabilidad del 3,58 por ciento. Esto supone un 25% menos que lo que tuvo que pagar en la anterior subasta de agosto, cuando tuvo que pagar un tipo de interés medio del 4,813 por ciento, mientras que en cuanto a interés marginal. Eso sí, este menor tipo de interés se ha traducido en una menor demanda. El ratio de cobertura se ha quedado en las 1,78 veces frente a las 2,14 veces de la anterior subasta.
De momento, el mercado de renta fija parece estar acogiendo especialmente bien la subasta realizada por el Tesoro. De hecho, el bono español a diez años cae ahora por debajo del 5 por ciento, algo que no sucedía desde finales de agosto y la prima de riesgo con respecto al bono alemán experimenta su segunda sesión consecutiva de caídas al retrocedr hasta los 311 puntos básicos, frente a los 324 de ayer.