MADRID (Reuters) - El Ibex-35 de la Bolsa española remontaba posiciones a mediodía del martes, pese a lo cual todos sus componentes continuaban teñidos de rojo ante renovados temores de los inversores sobre Grecia y la amenaza de una eventual recesión a escala global.
A las crecientes preocupaciones sobre un eventual impago por parte del país heleno, se sumaba la tesis de que las múltiples vueltas de tuerca de las políticas fiscales europeas acabarán por estrangular cualquier expectativa de crecimiento por mucho tiempo.
En este sentido, la agencia de calificación de crédito Standard & Poor's advirtió el martes sobre un riesgo de doble recesión en Europa por la caída de la confianza empresarial en la zona y la desaceleración de la economía estadounidense.
"Nadie debería sorprenderse de que Grecia no pueda cumplir con su objetivo de reducción del déficit público. Los excesos del pasado no se eliminan de la noche a la mañana con una terapia fiscal de caballo. Con esto se están generando problemas aún más graves. Grecia sería como el primer eslabón de la cadena del riesgo fiscal y eso es lo que ve ahora mismo el mercado", dijo un analista que pidió no ser identificado.
"Los mercados quieren ver expectativas de crecimiento como única manera de salir de la crisis y esa es la clave para generar confianza entre todos los agentes económicos", añadió.
En España, el paro duplicó en septiembre el número de desempleados frente al mismo mes del año pasado generando decepción entre analistas, que esperaban una leve mejoría.
Informes de prensa sobre la posibilidad de que la mora en la banca española se acerque a los niveles récord del 9,0 por ciento de 1994 también se unían al sentimiento negativo de los inversores y golpeaban con particular virulencia al sector financiero.
Por su parte, el diferencial de la deuda española a 10 años frente a su equivalente alemán subía hasta los aledaños de los 340 puntos básicos (pb) frente a los 328 pb de las últimas transacciones del lunes.
Con este trasfondo, Banco Santander caía un 2,33 por ciento y BBVA un 2,82 por ciento.
El otro gran valor del Ibex, Telefónica, perdía cerca de un uno por ciento.
Abengoa, que repuntó con fuerza tras la noticia de que el fondo de inversión estadounidense First Reserve (FRC) invertirá 300 millones de euros en su capital social, también sucumbía a la corriente bajista del mercado con un recorte cercano al 3,0 por ciento.
El sentimiento negativo también impregnaba a otros grandes valores como Iberdrola, que bajaba en torno al dos por ciento, Repsol, que se dejaba un 2,33 por ciento e Iberia que retrocedía un 5,44 por ciento.
Los títulos de Arcelor Mittal caían un 3,54 por ciento después de que el lunes anunciara que frenará la producción de acero en su planta de Sestao, Vizcaya, en noviembre y diciembre.
Sacyr Vallehermoso, que según la prensa suspendió el consejo de administración previsto para el lunes y lo trasladó al miércoles a la espera de dos reuniones clave entre sus accionistas, se replegaba un 7,36 por ciento, la mayor caía de entre los valores que componen el Ibex.
Prisa, que no cotiza en el índice selectivo, indicó que recibirá una inyección de 150 millones de euros con una conversión de warrants en manos de sus accionistas. Sus acciones subían cerca de un 8,07 por ciento.
A las 13:15 horas, el Ibex-35 perdía un 2,50 por ciento, a 8.148 puntos, mientras el índice de principales valores europeos Eurofirst se dejaba un 2,59 por ciento.