
Muchos inversores y economistas se preguntan si el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, todavía puede influir en los mercados con su política monetaria. El comportamiento reciente de los mercados demusetra claramente que puede, pero no de la forma en que le gustaría.
Durante el tercer trimestre recién terminado, el activo con mejor comportamiento en EEUU fue el futuro sobre el bono a 30 años, que subió más del 17%. Los futuros sobre el bono a 10 años no se quedó muy lejos, con una ganancia del 7%.
Mientras tanto, el S&P 500 perdió el 17%. Estos resultados pueden atribuirse directamente a las expectativas de la Opercaión Twist confirmadas por el anuncio del 21 de septiembre, que pretende mantener bajos los tipos a largo plazo y animar a los inversores a asumir más riesgo, por ejemplo comprando acciones. El problema es que los inversores siguen acumulando bonos, no bolsa.
"Seguir al Tío Ben ha vuelto a funcionar", afirma Daniel Dicker, de MercBloc, que se hace eco de la vieja máxima de Wall Street "No luches contra la Fed". "Los bonos siguen subiendo porque todo el mundo cree que no pueden seguir subiendo. Pero lo hacen, y acaban con todos los que apuestan por una caída".
Una mirada por el espectro de inversión muestra la mano no tan invisible de Bernanke. El oro estuvo entre los mejores activos por el temor a que esta nueva forma de estímulo monetario, junto con las dos rondas anteriores de quantitative easing, dispare la inflación.
Pero el impacto de Bernanke se sintió mucho también a la baja. Así, el cobre fue el peor activo, con un desplome del 28% en los últimos tres meses, después de que la Fed dijera en septiembre que "hay significativos riesgos bajistas para la perspectiva económica".
"Uno de los muchos problemas del QE y de sus derivados es que los inversores tienen que vender algo para comprar algo", explica Joseph Lavorgna, economista jefe para EEUU de Deutsche Bank. "En el caso del Twist, si la Fed va a bajar los tipos artificialmente, los inversores se lanzarán a por los bonos y, en el proceso, venderán los activos de riesgo que precisamente la Fed quiere que compren".
Ahondar en pérdidas
Bernanke todavía mueve los tipos de interés y otros mercados, pero el efecto deseado por el presidente de la Fed "incrementar el crédito y las inversiones de riesgo no está ocurriendo. Entre los principales sectores del S&P 500, los bancos perdieron casi una cuarta parte de su valor en el trimestre por el aplanamiento de la curva de tipos que implica la Operación Twist".
Este movimiento reduce la capacidad de las entidades para ganar dinero tomando prestado a tipos bajos a corto plazo y prestando a otros a tipos más altos a largo plazo. Los bancos ahondaron esas pérdidas ayer, el primer día del nuevo trimestre.