La compañía productora y distribuidora de productos de aluminio se sitúa a la cola del índice industrial Dow Jones. Gracias a un descenso de su cotización por encima del 4% que hace que el precio de sus acciones se ubique sobre los 9,12 dólares, aunque en el intradía sus títulos han marcado un mínimo en 52 semanas de 9,05 dólares.
El mercado reacciona de esta manera después de que varias firmas de analistas hayan decidido recortarle la recomendación a este valor. Entre las casa de analistas que han obrado de esta forma se encuentran J.P. Morgan que rebaja su precio objetivo un 22% desde los 22 hasta los 17 dólares. Rebaja de valoración que resultan recurrente ya que el pasado 26 de septiembre Deutsche Bank ademas de le bajó su valoración desde los 20 a los 14 dólares, además cambió su consejo de compra por retener.
Por su parte el consejo de mercado recogido por FactSet le atribuye a esta compañía una recomendación de mantener a un precio objetivo de 18 dólares. Así, con esta valoración el potencial alcista a doce meses que se le asigna a esta empresa supone un 79%. En los últimos dos meses ningún banco de inversión que le hace seguimiento ha revisado al alza el precio de equilibrio hacia el que deberían tender sus títulos en base a sus fundamentales.
A lo largo de 2011, acciones de esta compañía se desploman más de un 41%. Mostrando una evolución peor a la de su selectivo principal, el Dow Jones, que en el mismo intervalo de tiempo cede en torno a un 7%.
