Malos tiempos para las materias primas. Desde el martes de la semana pasada las commodities parecen haber olvidado lo que es cerrar una sesión en números verdes y las continuas caídas han erosionado sustancialmente el precio de estos valores negociables, sobre todo en el caso de los metales preciosos y en el crudo.
En lo que respecta a los metales nobles, los descensos de ayer del 2,2% en el caso del oro y el 4,33% la plata, hicieron que los precios de las onzas de ambos pasara a los 1.601,9 y 29,8 dólares, respectivamente. Un descenso que supuso llover sobre mojado, ya que la bajada que acumulan en las últimas cuatro sesiones es de un 11% para el metal amarillo, en la que es ya su mayor corrección en cinco años, y del 23,4% para el argentino. Lo que viene a poner de manifiesto que la fuerte escalada de estas dos materias primas venían alentadas por un componente especulativo que se aprovechaba de su carácter de activos refugio en contextos de aversión al riesgo.
Menos abrupta, pero también significativa, es la corrección del petróleo. De hecho, ayer se anotó tímidos avances en su cotización que le permitieron romper con la tónica de las tres jornadas precendentes. El barril Brent, de referencia en Europa, se anotó un repunte del 0,3%, hasta los 104,3 dólares, mientras que el americano West Texas subió un 0,1% hasta los 80 dólares. Oscilaciones que, si bien atenúan, no compensan las caídas previas. Así la corrección tanto del barril del Mar del Norte como del tejano en las últimas cuatro jornadas se sitúa en el 6 y el 8%, respectivamente.
El euro también sufre
En el mercado de divisas, el euro siguió una tónica similar a la de las commodities. De esta forma, en su cruce frente al resto de principales divisas perdió fuelle a excepción del franco suizo, contra el que se apreció un 1%, hasta los 1,21 francos. En su tipo de cambio ante el billete verde llegó a caer hasta los 1,336 dólares, su nivel más bajo desde enero, aunque luego se recuperó hasta los 1,35. Frente a la moneda nipona, el euro cedió un 0,2%, hasta los 103, 1 yenes -con un mínimo en los 101,9- y sigue en mínimos de una década.