
Los niveles cercanos a mínimos de 2009 de las bolsas no son casualidad. Las dudas sobre la resolución del rescate griego, el fantasma de la recesión o la necesidad de liquidez de los bancos europeos, son algunas de las razones que están haciendo mella en los parqués.
Pocos valores se salvan de las caídas y, mientras algunos inversores pierden con los descensos de sus cotizadas, otros acumulan ganancias con sus caídas. Se trata de los inversores bajistas, es decir, aquellos que toman posiciones en un valor con la expectativa de que éste baje.
Según la última publicación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), este tipo de inversiones ha aumentado en 15 cotizadas -12 de ellas pertenecen al Ibex 35-, mientras que tan sólo han retirado sus garras de cuatro valores en los últimos quince días.
Los descensos acumulados de las bolsas llevaron el viernes a algunas compañías españolas -entre ellas Gamesa, FCC, Amadeus, Acerinox, Mediaset, Abengoa o Meliá Hotels- a cotizar en sus precios más bajos del año. A simple vista pueden parecer valores muy dispares, pero todos ellos tienen una característica en común. ¿El motivo? La prohibición de invertir a la baja en el sector financiero (ver texto inferior) ha llevado a estos valores a convertirse en algunos de los predilectos por los inversores bajistas en la última quincena, según los últimos datos publicados por el regulador.
Aunque, sin duda, el castigo más fuerte ha sido para Gamesa, en la que los inversores a corto han pasado a controlar un 4,24 por ciento de su capital, desde el 3,17 por ciento anterior, el mayor porcentaje en manos de los osos desde diciembre de 2010. Pero la penalización que sufre el valor va más allá de este tipo de inversores, puesto que sus títulos se dejan un 45,15 por ciento en el parqué en el transcurso del año 2011.
Otro récord ha sido el de FCC. En su caso, los bajistas han aumentado en 0,63 puntos porcentuales, hasta poseer un 5,67 por ciento del capital de la compañía, la mayor cifra alcanzada desde que la CNMV hace públicos estos datos.
Otra sorpresa, aunque negativa, ha sido la de Enagás. La compañía energética, que había logrado ahuyentar a los bajistas de su capital hasta el momento, ha contado con la visita de los osos en los últimos quince días, por primera vez desde la publicación de estas cifras. En concreto, los inversores a corto han entrado para controlar el 0,47 por ciento de la compañía. No son buenas noticias para el grupo cuyos títulos alcanzaron ayer su precio más bajo del año en los 12,46 euros, y cede en el parqué un 14,84 por ciento en lo que llevamos de año.
Un comportamiento distinto al de Grifols, que aguanta estoicamente el envite bajista. Sus títulos logran repuntar más de un 32 por ciento en 2011, pese a ser la tercera compañía con más osos en su capital.
¿Dónde pierden 'fuelle'?
En esta ocasión, tan sólo cuatro compañías españolas-Deoleo, Ercros, Indra y Zeltia- han logrado disuadir a los accionistas que invierten con la expectativa de que un título baje. La mayor huida de los bajistas ha sido en el caso de Zeltia, en la que los inversores a corto han descendido en 0,22 puntos porcentuales, hasta controlar un 1,44 por ciento del capital de la compañía en los últimos quince días.