
A pesar de que a lo largo de la mañana ha registrado caídas, tras presentar sus resultados que han sido mejor de los esperados, registrado un beneficio neto un 14% superior al del mismo período del año anterior mientras que los analistas preveían un incremento del 7%, el valor sube.
Inditex está viviendo una semana cargada de citas importantes. Tras entrar a formar parte el lunes del Eurostoxx50, hoy la cadena textil ha presentado sus resultados correspondientes al primer semestre fiscal.
El grupo textil obtuvo un beneficio neto de 717 millones de euros en el primer semestre de su ejercicio fiscal (desde el 1 de febrero hasta el 31 de julio), lo que supone un aumento del 14% respecto al mismo periodo del año anterior. Estos resultados han sorprendido ya que la media de analistas esperaban un incremento en el beneficio neto del 7% u 8%.
A pesar de que el grupo lideraba el IBEX 35 al inicio de la sesión, con un alza del 1,48 %, hasta marcar un precio de 63,97, a lo largo de la mañana los números rojos han sido los protagonistas. La compañía dirigida por Pablo Isla cedía alrededor de un 1,2%, convirtiéndose en el valor que más se desplomaba del Ibex 35, aunque ha conseguido reponerse y al cierre del mercado ha sido el valor que más ha subido del Ibex con un alza del 0,95%. El precio de sus acciones ha concluido en 63,65 euros.
No obstante, en lo que va de año consigue un repunte superior al 11%. A principios de mes la empresa gallega recuperaba la recomendación de compra, por parte del consenso de mercado recogido por FactSet, que no ostentaba desde marzo de 2009.
Por otro lado el beneficio bruto de explotación (EBITDA) fue un 9% superior, mientras que el beneficio neto de explotación (EBIT) registró un aumento del 10% al de un año antes.
Aunque los gastos operativos se han elevado un 11%. La empresa lo achaca como consecuencia del resultado de la nueva superficie comercial abierta y los gastos variables vinculados al crecimiento de venta, incluyendo todos los gastos de lanzamiento de las nuevas aperturas.